Cáceres.- La Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Universitario de Cáceres ha dado un salto cualitativo en la atención al paciente crítico, implementando una serie de mejoras que destacan por su enfoque en la humanización y la eficiencia técnica.
En un esfuerzo por ofrecer un entorno más tranquilo y privado, la UCI ha instalado puertas transparentes en todos los boxes, reduciendo significativamente el ruido y aumentando la intimidad de los pacientes. Esta medida se suma a la adquisición de equipos de vanguardia como el tromboelastógrafo “Point-of-care”, que permite una evaluación instantánea de la coagulación sanguínea, y un manómetro automático para el control preciso de la presión en pacientes intubados.
La digitalización completa del sistema de información clínica, incluyendo la gasometría arterial, elimina la necesidad de papel y optimiza el seguimiento del progreso del paciente. Además, la plantilla de la UCI se ha fortalecido con la incorporación de cuatro nuevos profesionales de enfermería, mejorando así la calidad del cuidado ofrecido.