Arranca la temporada 2025/2026 con 879.213 plazas, tarifa plana para pensiones bajas y opción de viajar con mascotas, pero persisten las quejas por los precios y el reparto desigual de destinos
Cáceres / Digital Extremadura, 19 de octubre de 2025.-
Los viajes del programa de turismo del Imserso han vuelto a ponerse en marcha este domingo, 19 de octubre, con un total de 879.213 plazas en juego y varias novedades que buscan actualizar un plan veterano y emblemático del Estado del bienestar. Entre ellas, la esperada tarifa plana de 50 euros para pensiones más bajas y la posibilidad de viajar con mascotas, una medida que ha despertado simpatía entre los mayores más animalistas.
Sin embargo, bajo el entusiasmo inicial se esconde una realidad menos amable: las subidas de precios, la escasez de destinos disponibles en comunidades como Extremadura y la discriminación en las fechas de salida que ya han generado malestar en buena parte de los usuarios.
Bustinduy: “El Imserso es hablar de un Estado social que cuida”
El ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, inauguró la nueva temporada en Zamora, acompañado por la directora general del Imserso, Mayte Sancho, y el alcalde Francisco Guarido. En su intervención, el ministro defendió la esencia pública del programa y su “vocación universal”.
“Hablar de los viajes del Imserso es hablar de un Estado social que protege, cuida y da bienestar a sus ciudadanos”, afirmó.
Bustinduy destacó que la tarifa plana de 50 euros alcanzará a 7.447 plazas, destinadas a pensionistas con menos recursos, y que por primera vez se permite viajar con animales domésticos de hasta 10 kilos, incluido el transportín.
Viajar más allá del mar
Por su parte, Mayte Sancho puso en valor el creciente interés de los mayores por conocer el interior del país. “En los años 80 había muchas personas que no conocían el mar. Ahora eso ha cambiado: crece la demanda de turismo interior, cultural y natural”, subrayó.
Los datos confirman esa tendencia: el 23,9% de las plazas (210.787) corresponden al turismo de escapada, que incluye circuitos culturales, naturaleza, capitales de provincia, Ceuta, Melilla y destinos europeos.
El resto se reparte entre la costa peninsular (440.284 plazas) y la costa insular (228.142).
Precios más altos y desigualdades regionales
Los precios varían según el tipo de viaje, destino y temporada. Van desde 132,91 euros por escapadas de cuatro días a capitales de provincia en temporada baja, hasta 564,72 euros por estancias de 10 días en Canarias con transporte en temporada alta.
Aunque las subidas han sido justificadas por la inflación y los costes del transporte, las asociaciones de mayores y colectivos de pensionistas denuncian que el incremento respecto a la pasada temporada ha sido excesivo, lo que ha dejado fuera a muchos usuarios tradicionales del programa.
“El Imserso se vende como un derecho, pero cada año es más difícil conseguir plaza, y cada vez hay más diferencias entre comunidades. En Extremadura, por ejemplo, muchas agencias ni siquiera han recibido las listas a tiempo”, lamenta una representante de la Unión Democrática de Pensionistas de Cáceres.
Lupa DEx
Un derecho social convertido en carrera de obstáculos
El Imserso presume de pluralidad territorial, pero los hechos demuestran lo contrario. Las fechas de salida se concentran en determinadas comunidades, mientras otras —como Extremadura, Castilla-La Mancha o Aragón— ven reducidos sus cupos y retrasadas sus salidas.
Los mayores de estas regiones deben desplazarse cientos de kilómetros hasta aeropuertos o estaciones habilitadas, lo que encarece el viaje y dificulta su acceso.
A esto se suma que los nuevos precios superan el umbral psicológico de muchas pensiones mínimas, pese a la llamada tarifa plana, limitada a poco más de siete mil plazas. Y aunque se permite viajar con mascotas, las restricciones de peso y transporte hacen que la medida sea más simbólica que real.
En definitiva, el programa que nació para democratizar el turismo se enfrenta ahora al reto de no convertirse en un lujo estacional.
Impacto económico y social
Desde el Imserso recuerdan que estos viajes generan empleo y mantienen activa la economía local en temporada baja, especialmente en destinos costeros. Además, fomentan la solidaridad intergeneracional e interterritorial, uno de los pilares del programa.
Pero la pregunta sigue en el aire: ¿puede un modelo con más de tres décadas seguir funcionando con los mismos esquemas en una sociedad envejecida, diversa y desigual?
La temporada 2025/2026 del Imserso acaba de arrancar, pero la batalla por la equidad y la accesibilidad aún no ha hecho más que comenzar.