macarena
Comparte en redes sociales

¡¡No lo soporto!! ¡¡Me saca de mis casillas!! ¡¡Me pone de los nervios!! ¿cuántas veces has tenido en la boca estas palabras u otras similares? ¿cuántas veces has pensado en mandar muuuuy lejos a las personas de tu alrededor? ¿Cuántas veces has pensado que el mundo confabula contra ti, por no salirte las cosas como deseas? Quizás demasiadas…

Cuando nuestras expectativas no se cumplen, enseguida activamos nuestro “recetario de excusas, justificaciones y culpas a otros” queriendo justificar lo injustificable, ya que el único responsable de tu enfado eres tú mismo. Quien siente ira, eres tú. Quien sale de sus casillas, eres tú. Quien no consigue activar su autocontrol, y gestionar las situaciones de manera más “inteligente” eres tú. Enfadarte con el mundo, o esperar que todo salga a pedir de boca y, si no te enfadas, es un comportamiento poco maduro.

¿Hay detonantes? ¿Hay situaciones que… por inesperadas, indeseadas o inapropiadas a nuestras expectativas, nos llevan a experimentar la emoción de la ira, con todas sus variantes? Mandar lejos a esas personas que, según nuestra mirada corta, culpamos de nuestro estado de ánimo, no es más que una huida hacia delante.

La ira se manifiesta cuando nuestras expectativas se ven truncadas o los resultados no son los que deseamos. Esto nos lleva a una aparición intensa, profunda y, en ocasiones, descontrolada que nos lleva a sentir vergüenza, por nuestra airada respuesta. En muchas ocasiones, incluso cuando estamos en plena “actuación”, nos estamos dando cuenta de que no deberíamos estar diciendo o haciendo lo que hacemos, pero no sabemos pararlo a tiempo.

macarenaCuando sentimos ira y la expresamos de manera descontrolada, atribuyéndola a otra persona, ¿no nos estamos dando cuenta de que, de manera consciente o inconscientemente, estamos dando todo el poder de nuestro bienestar a esa persona?

Cuántas veces hemos dicho…, “tengo la sartén por el mango en esta situación” pues cuando descontrolamos nuestra forma de responder ante una situación o persona, es como si diésemos el mango de la sartén al otro, bajásemos nuestra cabeza y nos dejásemos dar un sartenazo. Este sartenazo no es más que la consecuencia de ceder a los demás el control sobre nuestras emociones.

Nos guste más o menos, los únicos responsables de cómo nos sentimos, somos nosotros mismos. La misma situación a una persona puede enfadarla y a otra, no. De cómo percibamos la realidad que tenemos por delante depende cómo reaccionemos ante ella.

Me comentaba una persona que en una conversación con su jefe, él quiso expresar una idea y que sin terminar de hacerlo, su jefe le espetó un “a ti no te pago por pensar”. Ante esa respuesta él se llenó de ira y quiso haberle dicho muchas cosas pero el miedo a que pudiera ser despedido, le frenó. Le frenó su comportamiento, pero reconocía que cada vez que pensaba en esa situación su enfado iba a más. Y que cada vez que lo veía, rememoraba esa situación, y se reabría su malestar.

Si nosotros pensamos en que el comentario del jefe, con todos sus motivos internos para hacerlo, es como una bolsa de basura maloliente, no nos quedaríamos jamás con una bolsa “apestosa” a nuestro  lado, tenderíamos a sacarla y alejarla de nosotros. El motivo por el cual el comentario de su jefe “apesta” es porque nosotros decidimos coger una basura emocional que no es nuestra y decidimos llevarla encima. La dificultad, pobreza interior o falta de capacidades para expresar correctamente del jefe, no tiene porqué hacernos responsables de eso que dijo, sino que debe llevarnos a un espacio de reflexión en el que decidir qué hacemos con ello. ¿Dejamos que nos dé un sartenazo o damos un paso al frente y, aceptamos que lo que nos pertenece es nuestra responsabilidad de decidir qué importancia y protagonismo damos a lo que ocurre a nuestro alrededor?

Sé que no es tarea fácil, sin embargo es un bonito reto para el año nuevo que ha entrado. ¿Aceptas el reto?

“Si eres paciente en un momento de ira, escaparás a cien días de tristeza” Proverbio chino

Macarena Muñoz Gómez

www.grupotalentia.com

Coach, Consultora y formadora 

Experta en Comunicación interpersonal y gestión emocional

Socia Directora de TALENTIA.

 


Comparte en redes sociales

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *