La Policía Nacional ha llevado a cabo una de las operaciones más significativas en España contra la distribución de pornografía infantil a través de plataformas digitales. Como resultado, se han detenido a 121 personas en todo el país, incluyendo dos arrestos en Cáceres que resultaron en encarcelamientos.
La operación, iniciada por la Unidad Central de Ciberdelincuencia, ha permitido la incautación de un total de 500 terabytes (TB) de contenido ilícito. Durante los 125 registros realizados en todo el país, se han intervenido 368 discos duros, 114 memorias USB, 100 DVD’s, 60 ordenadores y otros equipos informáticos. El material audiovisual confiscado a los detenidos incluye 500 terabytes de contenido pornográfico de extrema dureza protagonizado por menores de edad.
Los 121 detenidos, compuestos por 118 hombres y tres mujeres, utilizaban la misma plataforma digital para obtener y compartir el contenido ilícito. En Madrid, uno de los arrestos permitió la intervención de más de dos millones de archivos de abusos sexuales cometidos sobre niñas de muy corta edad, muchos de los cuales se caracterizaban por el alto grado de violencia empleado sobre las víctimas.
En Alicante, se arrestó a un hombre que poseía una gran cantidad de archivos multimedia que contenían imágenes explícitamente sexuales de dos varones menores de edad. Durante el análisis de los archivos, los investigadores descubrieron que el material había sido grabado en el interior de la vivienda del detenido.
En Cáceres y Almería, se detuvo a tres personas y los tribunales determinaron su ingreso en prisión debido a la cantidad de contenido localizado en su posesión. Uno de estos detenidos llegó a un acuerdo de conformidad por cinco años de prisión por un delito de posesión y distribución de material de explotación sexual infantil.
Durante los registros, se intervinieron 946 dispositivos de almacenamiento electrónico, incluyendo 368 discos duros, 427 CD’s y DVD’s, 114 USB, 37 tarjetas de memoria, 60 ordenadores, 47 teléfonos móviles, seis tabletas, una videocámara y otros dispositivos electrónicos.
Todo el material intervenido en la operación está siendo sometido a un análisis técnico policial. El objetivo es buscar nuevas evidencias que permitan continuar las investigaciones para identificar nuevas víctimas de abuso sexual o contactos de los detenidos que puedan formar parte de una red de pederastas.
Las detenciones son el resultado de una investigación iniciada a raíz de las labores preventivas de ciber patrullaje de la Policía Nacional para luchar contra las redes pedófilas.
La operación ha requerido la participación de 46 unidades territoriales de agentes especializados en ciberdelincuencia.
