Al titular: » Pedro Sánchez da por hecha su investidura: «Habrá un gobierno progresista», Feijóo «será jefe de la oposición», hay que espetar, al menos a día de hoy, QUE NO, PEDRO, QUE NO.
Y es que analizando declaraciones y más declaraciones triunfalistas y sobre todo estentóreas del aun presidente del gobierno de España en funciones, y por lo que se pueda saber » de fuentes absoluta y bien informadas» de » elementos» muy cercanos a Ferraz, no todo el pescado está vendido porque entre otras cosas, no se fían ni un pelo del prófugo del maletero, que vive como dios en Waterloo a costa de nuestro erario público, ni de sus adláteres, esos y esas que están en el Congreso de los Diputados que a la hora de votar, pueden cambiar de opinión en un tris tras, sr Sánchez.
Esto que decimos ni es una boutade ni tampoco una gilipollez de tres al cuarto. Es, simplemente, el verdadero sentir del establishment socialista que se preocupa y muy mucho porque su jefe, en cualquier ocasión que el mismo propicia, diga cosas como esta: » …buscaré votos hasta debajo de las piedras», aunque sea piedra del suelo del palacete belga, en donde ya han estado la «glamourosa vicepresidenta Yolanda y el major peneuvista Otuza, en una suerte de dislates y apretones de manos con un delincuente que se mofa de España sin que se le mueva un pelo de su flequillo.
Así las cosas, lo último de Peedroo, en la red social X, que va y suelta » El señor Feijóo se presenta a la investidura para ser elegido jefe de la oposición. Esa será una magnífica noticia para España porque tendremos 4 años más de Gobierno progresista, que revaloriza las pensiones, sube el SMI, comprometido con el feminismo y la emergencia climática.». Y se queda tan a gustito, a sabiendas que el pescado no solo no está vendido sino que a medida que pasan los días, empieza a oler, y no precisamente a gloria bendita, cocinado en fogones de una falsa constitucionalidad ni tampoco a favor de la victoria, porque esto de la amnistía es la piedra angular o de un cambio radical del » espíritu del 78″ , con las consecuencias que ello conlleva o de que la auténtica democracia triunfe como desean al menos once millones de españoles.
Antes de la fallida investidura de Feijóo, habrá dos manifestaciones que van a tener una gran repercusión social, el próximo domingo 24 de septiembre, convocada por el Partido Popular en Madrid y el 8 de octubre, también domingo, propiciada por la Sociedad Civil Catalana. Ambas citas van a ser dos auténticos termómetros de como siente España ante tanto enredo en una comedia que no parece tener fin y que podría culminar bajando el telón de la realidad social y no del interés político y del poder por el poder para que el 14 de enero de 2024, domingo, claro, y por ejemplo, nos citemos de nuevo ante las urnas.
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