croissant
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Hoy lunes, 30 de enero, se celebra el Día Mundial del croissant, un bollo artesano que como esté bien elaborado, es una de las exquisiteces del desayuno o la merienda, preferentemente.

¡Viva Monsieur le Croissant! Y olé..

El croissant es de mis bollos favoritos, siendo yo un adicto a la bollería pero no a la industrial sino a la auténtica, a la artesana, a la de la Confitería Isa, La Guinda, El Horno de San Fernando o Gretel, por ejemplo. He comido y degustado croissants de todo tipo y con multitud de ingredientes pero el que más me gusta es el que se consume tal cual, con un cafelito a media mañana o media tarde, escuchando música o leyendo, haciendo un altillo en el transitar del día. Y una curiosidad muy curiosa. Este bollo no se creó, como much#s puedan pensar, en el París de la France sino en Viena, Austria, a fines de 1600 y muchos lo confunden con la auténtica medialuna argentina, otro bollo exquisito, por cierto. ¿Estamos de acuerdo ?

La clave de este bollo con forma de media luna reside precisamente en la textura de hojaldre que hace que sean esponjoso y ligero. Aunque elaborarlo requiere de tiempo en su preparación porque tiene muchas fases, esto no implica que no queramos saber cómo se elabora un croissant delicioso como puede ser el resultante de la receta que te ofrecemos a continuación:

croissant 2

Ingredientes

Para 10 personas

  • 400g harina de fuerza
  • 100g de harina floja
  • 100g de azúcar
  • 2 huevos
  • 25g de levadura fresca de panadería
  • 100g de mantequilla en pomada
  • 7g de sal
  • 200g de mantequilla para hojaldrar
  • Leche para pintar los croissants
  • 1 yema de huevo para pintar los croissants

Elaboración

  1.   En una amasadora introducimos todos los ingredientes y en agua tibia diluimos la levadura de panadería para añadírsela a la mezcla. Amasamos durante 10 minutos para más tarde añadirle la mantequilla en pomada en dados y volvemos a amasar otra vez.
  2.  Dejamos que fermente la mezcla en un lugar cálido durante hora y media aproximadamente hasta que se doble su volumen. Cuando haya pasado este tiempo de reposo y preparamos la mantequilla (fría) para hojaldrar dejándola en forma de placa cuadrada de un centímetro de grosor.
  3.  Amasamos la masa con los puños haciendo hueco para introducir la mantequilla y le damos vueltas simples dejándola reposar en frío entre vuelta y vuelta unos 20 minutos en frío. Después, estiramos la masa a tres milímetros de grosor con un rodillo pero sin hacer demasiada presión y cortamos triángulos isósceles de unos veinte centímetros de largo.
  4.  Y comenzamos formando los croissants enrollándolos desde la base y los dejamos fermentar en la bandeja del horno una hora más. Pasado ese tiempo los pintamos con la yema y la leche y los horneamos entre 12 y 14 minutos a 200ºC.

 


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