Ocho peRsonas ahogadas en Extremadura en 2015

Extremadura ha registrado en 2015 un total de ocho personas ahogadas, de las que una fue en ríos, tres en otros medios acuáticos como charcas y pantanos, y cuatro en piscinas. Además, la Guardia Civil ha realizado el pasado año 21 auxilios y rescates.

La Guardia Civil ha trasladado una serie de consejos a los bañistas para una práctica segura en ríos y pantanos, entre ellos, la principal recomendación es el sentido común y evitar cometer imprudencias.

Asimismo, ha aconsejado prestar una «vigilancia especial y constante» a niños pequeños, sobre todo en piscinas particulares, ya que es donde los familiares más se relajan y ocurren más accidentes.

La gran cantidad de ríos y pantanos que hay en Extremadura, hace que la región se convierta en la comunidad autónoma con mayor litoral de agua dulce del país, algo que supone un «gran atractivo turístico» en época estival, sobre todo por la gran cantidad de piscinas naturales existentes principalmente en el norte de la provincia de Cáceres.

Durante años anteriores, en la provincia cacereña se han registrado diferentes incidentes con ahogamientos, sobre todo por las «imprudencias cometidas por los bañistas».

La afluencia masiva en algunas piscinas naturales o pantanos, junto con las altas temperaturas, hacen crecer los accidentes originados por ahogamientos o incidentes en el medio acuático que ponen en riesgo la vida de los ciudadanos, por lo que se deben extremar las medidas de seguridad en los lugares donde el baño está permitido.

La Guardia Civil, para evitar nuevos accidentes, ha trasladado a la ciudadanía una serie de consejos para que puedan disfrutar de una práctica segura en ríos y pantanos y evitar con ello que durante este verano se produzcan nuevos accidentes.

Entre ellos se encuentra no bañarse en ríos o embalses en los que no esté expresamente autorizado el baño y no hacerlo nunca ante la existencia de carteles que adviertan de la prohibición de peligro o prohibido bañarse.

También aconseja tomar «máxima precaución» en las zonas de riesgo, como zonas de gran caudal, en pozas naturales o bajo cascadas de agua. Además, si una persona se zambulle en el agua, se debe asegurar primero de la profundidad, de la existencia de rocas o piedras y sobre todo de la maleza que pueda existir, para evitar quedar atrapados.

Asimismo, se debe evitar introducirse de forma brusca en el agua en las horas de más calor, sobre todo en ríos y piscinas naturales, por la diferencia de la temperatura del agua con la del cuerpo, que puede desembocar en un corte de digestión.

Entre los consejos también se encuentran no bañarse nunca en charcas o pantanos que no sean conocidos o en los que se esté solos o con otra persona, ya que en caso de ocurrir algún incidente no se podrá actuar o prestar ningún tipo de auxilio.

«No sobrevalorar las actitudes como nadador y no intentar cruzar charcas o pantanos, ya que en caso de fatigarnos o sufrir algún calambre muscular o cualquier otro malestar, no seamos capaces de continuar nadando. Esta es una de las mayores imprudencias que se cometen y es el origen de la mayor parte de los accidentes», ha apuntado la Guardia Civil.

Asimismo, debemos mantener especial vigilancia a los niños en los lugares de baño, y muy especialmente en aquellos que no existan socorristas y en las piscinas particulares, aunque sean pequeñas.

En caso de algún incidente, se debe avisar de inmediato al 062 (Guardia