El Gobierno extremeño estudia romper el SIP en el que está Caja Badajoz

El presidente del Gobierno de Extremadura, José Antonio Monago, ha anunciado que si no son atendidas sus demandas políticas en defensa de los trabajadores de Caja Badajoz, su Ejecutivo no descarta nada, ni tan siquiera romper el SIP de Caja3 en el que está integrado la entidad extremeña.

José Antonio
Monago ha realizado estas declaraciones este martes en una rueda de prensa, en
la que ha informado de que ha invitado formalmente al presidente de Caja3 a
mantener una reunión con él en Mérida.

El jefe del
Ejecutivo regional quiere que el presidente de Caja3 se comprometa a un trato
igualitario, a una negociación que sea justa, a una política que respete a los
trabajadores de Caja Badajoz y que se comprometa a que el valor de la
aportación de la Caja extremeña en Caja3 sea muy superior al “indignante” 29
por ciento que tiene en la actualidad.

“Si nuestras
demandas políticas en defensa de los trabajadores de Caja Badajoz no son
atendidas, el Gobierno no descarta nada, ni tan siquiera romper el SIP, algo
que ya está estudiando el Ejecutivo regional”, ha aseverado Monago.

DECISIONES CON CONSECUENCIAS

A lo largo de
su intervención, el presidente extremeño ha recordado que hubo un momento en la
historia reciente de nuestro país en el que se tomó la decisión de que las
entidades ejemplares se fundiesen con las que no habían sido tan ejemplares
para que les sirvieran de modelo y liderarlas hacia un futuro que fuera más
seguro y certero.

Ante este
reclamo, ha añadido, las Cajas extremeñas acudieron “a pecho descubierto y sin
ocultamientos ni dobles intenciones. En concreto, Caja Badajoz se integró en
Caja3 dispuesta a ayudar, y lo que no sabía era lo que le esperaba”.

En este
sentido, ha informado de que en enero de 2010, Caja Badajoz disponía de un
patrimonio neto de 469 millones de euros, y a mediados de 2012 ese valor era de
41,55 millones.

Ese dinero se
ha ido, según Monago, “a tapar las grietas” de la CAI de Zaragoza y de la Caja Círculo
de Burgos, “dos entidades que entraron en Caja3 aparentemente limpias pero cuya
acumulación escondida en exposición a activos tóxicos deterioró a pasos
agigantados el estado del Grupo, un Grupo en el que al final todo el capital lo
acaba poniendo Caja Badajoz, y sin embargo el valor de Caja Badajoz se cifra en
un escasísimo 29 por ciento”.

Mientras todo
esto ocurre, el presidente extremeño ha sentenciado que el PSOE regional “mira
para otro lado”, porque “el PSOE de Extremadura se avergüenza tanto de lo que
no hizo, que ahora no es capaz de hacer absolutamente nada, ni siquiera de
suscribir una declaración institucional conjunta en apoyo a los trabajadores.
Éste no es el PSOE de Extremadura, es otra cosa”.

Ante este
panorama, José Antonio Monago ha realizado una serie de demandas al presidente
de Caja3, y «si nuestras demandas políticas en defensa de los trabajadores de Caja
Badajoz no son atendidas, el Gobierno no descarta nada, ni tan siquiera romper
el SIP, algo que ya está estudiando el Ejecutivo regional”.

CAJA RURAL DE EXTREMADURA

En la misma
rueda de prensa, Monago también se ha referido a la situación de Caja Rural de
Extremadura. Aquí ha enviado un mensaje firme a los directivos de Ccaja Rural
del Sur: “quien manda en Caja Rural del Sur será Caja Rural del Sur, pero quien
manda en Caja Rural de Extremadura es su Asamblea y su representante máximo es
el presidente de esta entidad extremeña”.

Por tanto, ha
manifestado que “se acabaron las amenazas, y que los trabajadores de Caja Rural
de Extremadura estén tranquilos porque este Gobierno está para protegerles”.

En este
sentido, ha avanzado que como Gobierno de Extremadura si “fuera necesario intervendremos
Caja Rural de Extremadura a través de la Ley de Cooperativas de Crédito”, y ha
concluido recomendando a los directivos de Caja Rural del Sur que “se centren en
Andalucía y que dejen a Caja Rural de Extremadura que se reorganice y tome sus
decisiones desde Extremadura”.