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Una celada de hierro, pieza del mes del Museo de Cáceres

CULTURA
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La celada es un casco medieval originario del norte de Italia, que gozó de una enorme popularidad en la Europa de los siglos XV-XVI. La pieza se puede visitar de martes a sábado, de 9 15 horas; domingos de 10 a 15; lunes y festivos, cerrado.

[Img #26126]La celata italiana tiene su origen en los centros de
fabricación de grandes armaduras de la región de Lombardía y el Véneto,
especialmente Milán y Venecia. Es una evolución a partir del bacinete, un casco
hemiesférico puntiagudo de hierro con o sin visera utilizado en toda la Edad
Media, que no proporcionaba protección suficiente a la cara de los
guerreros.  En origen la celada no
contaba con visera, lo que dejaba al descubierto el cuello y las mejillas del
guerrero, esto se solucionó alargando hacia adelante los lados del casco que
con frecuencia sólo dejaba expuesto los ojos, la nariz y la boca. Al estar
abierto proporcionaba un amplio campo de visión, estando indicado su uso para
la infantería de a pie, especialmente arqueros y ballesteros. Para proteger el
cuello se  prolongó la parte posterior,
el cubrenuca, rasgo que a la larga se convertirá en el signo característico de
este tipo de cascos.

 

A través del contacto con Italia, la celada pronto se hizo
muy  popular en Francia, Inglaterra y los
Países Bajos y finalmente fue adoptada en el sur de Alemania con el nombre de
Schallern (concha, o tazón), donde fue reelaborada con influencias locales en
los talleres de Augsburgo y Nüremberg, haciéndose más pronunciada la longitud
de la cola de casco. Con el tiempo, algunos ejemplares añadieron visera con una
simple ranura para la visión, y babero articulado con el fin de proteger toda
la cabeza.

 

La pieza del mes es una celada ligera sin decoración,
siguiendo los modelos italianos. Está forjada en hierro de una sola pieza. La
calva tiene forma semiesférica con cresta central hasta la parte posterior,
donde el cubrenuca es alargado y elevado con borde reforzado mediante vástago
de hierro, recubierto por el metal del borde enrollado sobre sí mismo. La parte
frontal es abierta, pudiendo haber perdido la visera móvil ya que presenta
remaches y orificios de remaches perdidos utilizados para unir el material de
refuerzo en el interior y la correa de sujeción. Presenta leves pérdidas de
metal en algunas partes, especialmente la cresta.

 

Progresivamente en las primeras décadas del siglo XVI se
abandona su uso, siendo reemplazado por un nuevo tipo de casco con visera fija
y prolongada, la borgoñota o celada borgoñona, que posteriormente sería
sustituida por los celebres morriones españoles, popularizados por los tercios
y conquistadores hispanos del Siglo de Oro.


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