En el mismo año perdió el trabajo, se quebró su matrimonio y estuvo a punto de perder la vista… y entonces comenzó la mejor parte de su vida. Desde niña le había gustado la fotografía, pero su padre sensatamente le aconsejó no recorrer esa senda inestable, y por eso estudió informática allá por el año 1983 y claro, tuvo trabajo desde 1985.
Pero desde el año 2008 es productora de video-arte y suele venir a colaborar
con el espacio “Baraka” de Villanueva de la Vera. Allí presentó el documental “PourQuoi? Una película corta de OUKA LEELE” una obra audiovisual que denuncia
la situación de la población en la República Democrática del Congo.
Ella trabajaba como Analista Funcional y de Sistemas de Información para
Retevisión, y en el año 1999 le ofrecieron ser corresponsal en una agencia de
noticias por internet, aquella incipiente herramienta de comunicación.
Cuéntanos esa parte.
Estaba entusiasmada. Aquella actividad me permitía retomar mi sueño adolescente
de ser fotógrafa, de modo que me compré una cámara digital, una Sony Mavica con
floppy disk ¿los recuerdas? y con ella salí a dar testimonio de todo lo que me
gusta, sobre todo del mundo de la cultura y de los movimientos sociales. Fue
así como conocí a Karmele Marchante y fui invitada al Club de las 25.
Pero todavía eras una informática con trabajo estable.
Sí, yo trabajaba en Retevisión y compaginaba ese trabajo con la colaboración en
la agencia de noticias, que no era un trabajo en sí, pero que me dio la
posibilidad de conocer a muchas personas interesantes y redescubrir mi faceta
artística. Luego en el 2003 me quedé en paro, me divorcié y un glaucoma estuvo
a punto de dejarme ciega. Gracias a eso, al tiempo libre y a la enfermedad, me
recorrí todas las clínicas oftalmológicas de Madrid y me dí cuenta de que
faltaba algo.
¿Así nace esperArte?
Supongo que se venía gestando desde mi infancia, desde ese amor a la imagen
como arte, y luego la informática me hizo tener una visión más futurista. Yo
estoy segura de que el arte es sanador. El arte nos puede curar, pero el acceso
al arte está muy limitado. Fue desde ahí que surgió el proyecto empresarial. Me
he enfocado en cuestiones terapeuticas como la dislexia o el glaucomoa, pero
también en visiones más sociales. Yo busco un equilibrio entre el servicio a la
comunidad, en mi caso hacer accesible el video-arte al público en general y la
sostenibilidad económica, claro que a veces es difícil.
¿A qué te refieres?
Vivir así entre la austeridad y la inversión. Hacer malabares entre la vida práctica
y los sueños. Lo difícil viene por que no estoy sola, también soy madre de una
adolescente y claro, a veces, me pide cosas que solo se consiguen con dinero,
como clases de canto, pero no siempre nos lo podemos permitir. Aunque estoy
segura de que esto, esta superación de la frustración, también es un
aprendizaje que ella necesita, que necesitamos las dos. Y en estas pequeñas
cosas veo lo amigas que somos, aunque no deja de dolerme por que ella canta, y
canta muy bien y duele que el dinero sea la piedra de toque de tus sueños.
¿Háblanos de “PourQuoi?”
Ya te he comentado que soy parte del club de las 25, una asociación de
periodistas feministas. En el 2010 conocimos la situación extrema de la
periodista congoleña Caddy Adzuba. La habían amenazado de muerte en varias
ocasiones y finalmente una bala pasó rozando su cabeza. Se hicieron las
gestiones para traerla a España y cuando se logró, organizamos una comida para
conocerla mejor. Ahora está propuesta al premio Príncipe de Asturias.
En aquella comida, que fue muy emotiva, con muchas mujeres fuertes e
independientes que lloraban al tomar conciencia de la valentía de esta mujer,
sabiendo que muchas de nosotras no nos atrevemos a levantar a voz ante
instituciones menos peligrosas, pudimos charlar con ella la fotógrafa Ouka
leele y yo. En ese momento le preguntamos «¿qué podemos hacer para
ayudarte?» y ella nos dijo: «Contadle a todo el mundo lo que sucede
en mi país». De modo que nos pusimos manos a la obra haciendo lo que cada
una sabe hacer, Ouke Lele el arte y yo la producción.
Lo que denuncia «PourQuoi?» es que en la República Democrática del
Congo se está utilizado como arma de guerra el cuerpo de la mujer, más de
500.000 mujeres violadas para generar terror en la población. Las violaciones
de guerra no son solo violaciones sexuales, a veces los violadores utilizan
otros medios. Cogen un cuchillo, por ejemplo, y lo introducen en el órgano
sexual de la mujer, y todo está en relación con la explotación mineral del
coltán, pero eso es algo que a las multinacionales no les interesa que se sepa.
¿Y cómo podemos ver «PourQuoi?”?
Es fácil, solo hay que ponerse en contacto conmigo en el teléfono 656402818 o
escribís a isabelbettina@yahoo.es, y lo organizamos. Claro que tiene un pequeño
coste. Lo normal es que no sea solo una proyección con debate sino también con
la colaboración de artistas en directo, tal como hicimos en el espacio “Baraka”
en Villanueva de la Vera. Allí estuvimos con Paulyta Libertad, Mónica Ibáñez y
la percusión de Nacho García Anda. Fue emocionante y pudimos conocer a personas
increíbles, ya te pesaré los contactos.
Para votar por la candidatura de Caddy Adzuba a los premios Principe de
Asturias de la Concordia puedes hacerlo en este enlace:
https://www.change.org/es/peticiones/premio-pr%C3%ADncipe-de-asturias-2013-a-la-concordia-a-la-periodista-congole%C3%B1a-caddy-adzuba#share