Tomar un trozo de este bizcocho de nata en el desayuno, a media mañana o en la merienda es toda una delicia. Y no lo digo yo, lo dice mi familia que han acabado con este bizcocho en un sólo día.
A la hora de hacer este bizcocho de nata podemos hacerlo tal cual os indico en esta receta o bien “customizarlo” con cualquier ingrediente aromatizante como ralladura de limón, naranja o vainilla. Además de que podemos cambiar las pipas de girasol caramelizas por otro tipo de fruto seco.
Lo mejor es que elabores este bizcocho de nata, lo degustes y vuelvas a elaborarlo con los cambios que tu prefieras, verás como la “base” no te defraudará.
- 4 Huevos “L”
- 250gr de harina
- 230gr de azúcar
- 200 ml de nata
- 90 gr Mantequilla
- 1 sobre de gasificante
- 1/2 Sobre de evadura
- 50 gr Pipas de girasol caramelizadas o cualquier otro tipo de fruto seco
- Ponemos la mantequilla en un vaso y disolvemos durante unos segundos en el microondas.
- Vertemos en un cuenco grande y añadimos la nata, 180 gr de azúcar y los huevos. Batimos todo bien.
- Incorporamos la harina, el gasificante y la levadura, que habremos tamizado todo junto, anteriormente.
- Mezclamos hasta conseguir una masa homogénea y sin grumos.
- Engrasamos un molde y vertemos la masa del bizcocho.
- Esparcimos por encima el resto del azúcar y las pipas caramelizadas, o cualquier otro fruto seco (almendras, nueces, avellanas, piñones, etc.).
- Introducimos en el horno, previamente precalentado a 180º, durante 45 o 50 minutos.
- Sacamos y dejamos templar el Bizcocho de nata.
- Desmoldamos, colocamos el Bizcocho de nata en un plato de presentación y, una vez esté frío, degustamos cuando queramos.
Una receta de bizcocho súper esponjoso,