El secretario general de CCOO de Extremadura, Julián Carretero, y el de UGT Extremadura, Francisco Capilla, han viajado este lunes a Estrasburgo para defender la continuidad del sector de tabaco regional y de sus empleos frente a los cambios que pretende introducir la Comisión Europea, que situarían al cultivo en la inviabilidad económica.
Capilla y
Carretero mantendrán varias reuniones para trasladar
directamente a representantes políticos en la Unión Europea la necesidad de
cambiar profundamente la propuesta de Directiva presentada por la Comisión y
que se debatirá días después en el Parlamento.
Entre otros,
habrá encuentros con el presidente del Grupo Parlamentario Socialista o con la
parlamentaria y ponente de la directiva, Linda Macwam.
Como respaldo
llevan en la mano el dictamen que sobre esta propuesta de Directiva aprobó en
julio el Comité Económico y Social Europeo (CESE), que recoge expresamente la
advertencia de que las intenciones de la Comisión ponen en peligro “una
cantidad considerable de puestos de trabajo en todos los sectores de la cadena
de valor de la agricultura, la producción, el empaquetado y la venta de tabaco
y productos afines”.
También
recuerda la importancia que este cultivo tiene para el mundo rural y para su
sostenimiento. UGT y CCOO destacan que unas 20.000 personas viven del cultivo y
transformación del tabaco en la región con 8.000 puestos de trabajo directos e
indirectos.
El impacto
negativo para el cultivo del tabaco de aprobarse la directiva sin tener en
cuenta el dictamen del CESE y los planteamientos sindicales respecto del empleo
sería terrible para Extremadura, con una fuerte concentración del cultivo en la
zona de La Vera y Vegas del Tiétar.
Está
demostrado que la producción de tabaco es fundamental para el empleo rural y la
fijación de población. Así, en los 20 municipios tabaqueros extremeños, la
densidad de población es superior a la media provincia cacereña y a la media
regional.
Con una tasa
de paro del 34 por ciento, la economía extremeña en recesión y una población
disminuyendo y envejeciendo, los planes de la Comisión sobre el cultivo del
tabaco serían una especie de «puntilla» definitiva a una producción
con una cadena de valor muy importante para el empleo regional y para la
economía de la zona.
CCOO y UGT de
Extremadura instan a la Junta de Extremadura, a los grupos políticos de la
Asamblea extremeña y a cuantos agentes sociales y económicos están involucrados
en los intereses del tabaco en la región a seguir peleando por la producción
tabaquera y el empleo.
Los sindicatos
también exigen al Gobierno de España que ejerza la opción de bloqueo a la
directiva para evitar que se vieran perjudicados los intereses españoles en los
términos de la directiva que pretende la Comisión y finalmente no se modifique
por el Parlamento Europeo.
