Mañana se celebra uno de los grandes debates del año en la Asamblea de Extremadura. El Debate de Presupuestos. La suerte está echada porque el PP cuenta con el apoyo anunciado, por acción u omisión, de los dos grupos minoritarios. Pero queda lo más importante. La política. Atrás quedan los juegos artificiales, el teatro con minúsculas de unos y otros . Llega la hora de la verdad, y cuando esta llega solamente hay dos modelos. Mañana se pondrán en evidencia. Y se hará, al menos por mi parte, con la fuerza de las razones, de los argumentos, de las propuestas. Es decir, con la fuerza de la política. Los ciudadanos que nos votaron lo hicieron para defender un proyecto. Presentamos una enmienda a la totalidad de los Presupuestos porque hay muchas razones para hacerlo y no encuentro ninguna para no hacerlo. Nos hemos quedado un poco solos en la defensa de aquellos valores que representan el centro izquierda y la izquierda, y que aspiran a volver a representar a la mayoría social . Pero no nos importa. Merece la pena luchar por las cosas en las que uno cree, sin trucos ni trampas, con valor pero sin precio. Claro que merece la pena. Porque nuestras palabras, nuestros mensajes y nuestros actos deben ser una esperanza para los ciudadanos.