Cierran
el canal 9 de la TV Valenciana, un mazazo para los trabajadores y una decisión
política sin ninguna duda. No he visto más desfachatez que ante la notificación
de una sentencia, que en este caso anulaba un ERE «perpetrado» en
dicha empresa, la autoridad política sin esperar a nada, el mismo día de su
notificación, opte por el cierre. Le han dicho a los jueces: me obligan ustedes
a la readmisión de cientos de trabajadores a la empresa, pues cierro la
empresa, ole y ole¡ ¡ ¡
El debate, que no es nuevo, está
servido. Doy mi opinión al respecto. Las televisiones autonómicas son y han
sido durante décadas el mejor altavoz y mensajero del poder de turno, y sirven
para «colocar» a gentes afines al partido, no solo del que gobierna
sino también de la oposición, que no han podido recalar en otros puestos
mejores. Cuestan una pasta al contribuyente y se fundamentan en el hecho
diferencial de la lengua, o en que en la parrilla de su programación tienen
contenidos referentes a la comunidad autónoma, léase el estudio de la jota, las
cigüeñas de Monfrague, las verbenas de mi pueblo, el tiempo en Burguillos de
Arriba, las perrunillas de tía Jacinta…. y entre tanto Consejeros
inaugurando, políticos adoctrinando, canal electoral, propaganda del que
gobierna, y la oposición callada porque algún día volverán.
Todas las TV autonómicas son altamente deficitarias, no por culpa
de los profesionales que trabajan en ellas, sino por una idea equivocada de
gestión, que se ha ido tragando dinero público sin control y que ahora pagan
los de siempre, los trabajadores. ¿Nadie pedirá en la TV valenciana
responsabilidad a los políticos que la han gestionado? Posiblemente digan que
lo heredaron de alguien….
