Cuando volví a Extremadura en 1988 como médico forense de los juzgados y tribunales de Badajoz, conocí a un JUEZ que me dejó marcado para siempre. Yo no tenía toda la capacidad para valorar sus conocimientos jurídicos, pero sí para darme cuenta de que los que con el trabajamos, nos sentíamos importantes. Era un gran JUEZ en medio de grandes jueces y juezas, de los que mucho aprendí. Por eso acompañarlo hoy en su toma de posesión como Vicepresidente del Tribunal Supremo de España. máximo órgano jurisdiccional en nuestro país, me ha llenado de orgullo como extremeño. Tiene una Bandera de Extremadura que le ha acompañado en sus diferentes destinos. Ahora cruzará la Plaza de las Salesas para ir de la Audiencia Nacional al Tribunal Supremo. Enhorabuena a un extremeño que no nació aquí y ni falta que le hacía, para serlo como el que más.