El consejero de Turismo, Víctor del Moral, y la directora general de Turismo, Elisa Cruz, han presentado en FITUR los proyectos Tajo Internacional-Destino Gastronómico y el Parque Temático Natural Alqueva, Del Moral y Cruz han destacado el carácter transfronterizo de ambos y su capacidad para integrar propuestas turísticas singulares y atractivas para el turista.
El
proyecto Parque Tajo Internacional–Destino Gastronómico integra dos espacios
naturales protegidos de idénticas características, situados en España y en
Portugal, con un elemento común, el río Tajo, frontera natural que actúa como
nexo de unión del territorio.
La
colaboración público-privada es también determinante en esta iniciativa, que
cuenta ya con 34 empresas asociadas, entre ellas establecimientos de
restauración, alojamientos, comercios, empresas productoras y empresas de
actividades.
Turismo
rural, de naturaleza y gastronómico se unen en un proyecto que, según Elisa
Cruz, “pretende dar a conocer el Parque Tajo Internacional a través de sus
platos tradicionales, sus productos gastronómicos de calidad y sus paisajes”.
Para
ello, se han diseñado numerosas experiencias que permitirán al viajero
descubrir el Parque desde un paseo en barco, conocer el mundo de la tenca,
exquisito manjar que se podrá pescar, cocinar y saborear en una sola jornada,
experimentar una montería o matanza tradicional, sentirse repostero por un día
junto a un artesano, o aprender el proceso de elaboración de quesos.
El
Parque Temático Natural Alqueva está ideado en torno a este gran lago
artificial, con 1.200 kilómetros de costa interior, situado sobre el río
Guadiana, y del que forman parte Olivenza, Alconchel, Cheles, Táliga y
Villanueva del Fresno. Sus aguas llenan de vida el Parque y forman el mayor
lago artificial de Europa Occidental, bañando tierras españolas y portuguesas.
El
proyecto, ha afirmado la directora general de Turismo, “pone el foco en el
turismo familiar, para quienes ha desarrollado una oferta única y atractiva”.
Así,
a Alqueva no le faltan mascotas ni atracciones, aunque no son las habituales en
este tipo de infraestructuras sino que, en este caso giran en torno a la
naturaleza, el agua y la cultura.
No
hay puertas, tarifas ni horarios para disfrutar de este territorio que, además,
ofrece experiencias que brindan la oportunidad de practicar actividades
acuáticas, pescar, explorar castillos y villas medievales, volar en parapente,
realizar un safari fotográfico o degustar una gastronomía única, que funde las
tradiciones española y portuguesa.
