La colecta de las Misas del domingo se destinarán a la Obra Pontificia de la Infancia Misionera | El mensaje de Infancia Misionera haría mucho bien en los ámbitos educativos españoles | Para el director de OMP España, Infancia Misionera interpreta el rostro de la Iglesia que muestra el Papa Francisco
España ha celebrado este domingo la Jornada Mundial de la Infancia Misionera. A través de distintas actividades en todas las diócesis, esta Obra Pontificia enseña a los niños españoles «que la alegría no está en tener sino en darse». Desde Bolivia, la misionera Mª José Pascual invita a los niños españoles «a no encerrarse en sí mismos»
Un cuentacuentos en Orense, un encuentro festivo en Madrid o Sevilla, la proyección de cine con valores en Zamora o La Rioja, una marcha misionera en Ciudad Rodrigo. son algunas de las actividades que los niños de la Infancia Misionera han realizado durante estos días en sus respectivas ciudades, antes de la celebración, el próximo domingo 26, de la Jornada de Infancia Misionera.
El director de Obras Misionales Pontificias (OMP) en España, Anastasio Gil, cree que muchos otros niños podrían sumarse a esta alegría y subraya que «la sociedad española tiene todavía una deuda con esta Obra Pontificia, porque en los ámbitos de formación de los más pequeños este mensaje que lleva la Infancia Misionera está todavía demasiado ausente».
Como recuerda Gil, en Infancia Misionera, los niños descubren que «da igual que sean pobres o ricos, todos pueden ayudar», y comprueban que «la multiplicación de los panes y los peces» es posible. Por eso, en 2013, la Infancia Misionera ha podido financiar cerca de 3.000 proyectos para atender las necesidades de los niños en más de 1.103 territorios de misión, a través de casi 22 millones de dólares que los niños de todo el mundo han aportado al Fondo Universal de Solidaridad. Para Anastasio Gil, «la Infancia Misionera, con su lema «Los niños ayudan a los niños» interpreta con fidelidad el rostro de la Iglesia que el Papa Francisco nos está mostrando cada día.»
Los misioneros que están con los niños en todo el mundo, como María José Pascual, Hija de la Caridad, conocen de cerca sus dificultades reales. La religiosa trabaja en «Amanecer», una obra social de la Iglesia Católica que surgió como respuesta al gran riesgo que corren los niños que viven en las calles de Boliva. Para ayudarlos, Mª José Pascual pide a los niños «que no se encierren en sí mismos y sean sensibles hacia las personas que sufren y pasan hambre y se solidaricen para que haya paz, justicia y amor».
Con este objetivo, OMP editó para la Jornada de Infancia Misionera 2014, el vídeo «La revolución de Jeferson», que se está proyectando estos días en colegios y parroquias.