Las cosas que son importantes no deben
tomarse a la ligera, y mucha rapidez se
ha dado a esa noticia, arrastrada por alguien con malévola intención, que ha
“machacado” con insistencia una de las
propuestas que ha realizado la Comisión que ha redactado el proyecto de reforma
fiscal.. Menos mal que la Portavoz del Gobierno intervino a tiempo y dijo que
el Ejecutivo rechaza la propuesta de imputar como renta la vivienda habitual
.
El
Gobierno no incluirá en la reforma fiscal la propuesta del comité de expertos
de imputar como renta la vivienda habitual, exenta en este momento., es sólo
una propuesta del análisis de los expertos y que, posteriormente, el Ejecutivo
elaborará la reforma que estime conveniente, atendiendo algunas de las
recomendaciones, pero rechazando otras.
Sin embargo, otras propuestas sí forman parte
de algunos asuntos que ya ha anticipado el Ejecutivo, ahora el Gobierno
pretende abrir el debate a los grupos parlamentarios, que podrán expresar su
opinión antes de la elaboración de las leyes tributarias que modificarán el
sistema fiscal. Una vez presentado el informe, empieza la tarea del Gobierno,
que analizará las sugerencias y elaborará su propia propuesta de reforma para enviarla
al Parlamento.
Esta comisión ha hecho algo que es muy normal
en las «mejores prácticas
internacionales» a la hora de practicar reformas fiscales globales, por
ejemplo así lo hacen en Canadá o en el Reino Unido, y constituye una forma importante
que abre un camino a la hora de llevar a cabo los debates previos
a la elaboración de una reforma de este calado.
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Uno de los ejes consiste en bajar tipos y
eliminar deducciones para reducir la carga que soportan familias y empresas y
facilitar el pago de impuestos. Entre otras medidas se proyecta rebajar el IRPF y el Impuesto de Sociedades,
pero también suprimir la compleja maraña de exenciones fiscales para no mermar
la recaudación, y queda claro que la
posibilidad de que la vivienda habitual en propiedad tribute en el IRPF queda
descartada porque es una medida contraproducente y claramente injusta, ya que graba
rentas que, en realidad no existen
Porque con las cosas de comer no se juega y
lo que a tantas familias le ha costado en esfuerzo adquirir su vivienda, debe
ser protegida, y hablamos de la primera vivienda donde cada familia vive
habitualmente, que ha sido hasta ahora lo primero que deciden quienes
constituyen una familia, la casa que es su seguridad mas inmediata.
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España necesita con urgencia un sistema fiscal
más simple y eficaz, que impulse el crecimiento y la creación de empleo sin
menoscabar la recaudación, al tiempo que garantice la equidad impositiva para
favorecer a las rentas media y bajas, Así, pues, se necesita una reforma que,
en general favorezca el crecimiento económico y la eficiencia fiscal, no se
deberán aplicar medidas contra unas clases medias que han pagado con su
sacrificio la mayor parte de la factura de la crisis.
El objetivo que persigue el Gobierno es que
ese sistema fiscal tiene que beneficiar
a 12 millones de contribuyentes, con especial atención a las PYMES, la conciliación
laboral y a los discapacitados. Contemplará una tarifa plana a la
contratación e impulsará la generación
de empleo estable y un programa de
Inclusión social, que el Gobierno completó con el Plan de Igualdad de
Oportunidades, y con respecto a las Pensiones, el Gobierno ya blindó el sistema
para que los pensionistas nunca vean mermado su poder adquisitivo.
“CON LAS COSAS DE COMER NO SE JUEGA”.
