Desde el Consejo Médico Extremeño de Atención Primaria (COMEXAP), constituido por todas las organizaciones implicadas en el primer nivel asistencial (Colegios de Médicos, Sociedades Científicas de Medicina de Familia y Pediatría y Sindicato Médico), queremos denunciar el hecho de que la aplicación estricta que de esta medida está haciendo el SES, obstaculiza el derecho del médico a su formación continuada
Una
asistencia sanitaria de calidad requiere de la formación médica continuada.
Esto, que entra dentro del sentido común, es un derecho y una obligación de los
profesionales sanitarios. A través de esta formación, los médicos extremeños
realizamos nuestra puesta al día en los conocimientos, habilidades y aptitudes
necesarios que nos obligan los continuos avances experimentados en las ciencias
biosanitarias, además de mantener el deber de servicio a las necesidades y
demandas de la población, según se desprende del articulado de la Ley 44/2003,
de 21 de noviembre, de Ordenación de las Profesiones Sanitarias.
La
Instrucción de 8 de Mayo de 2013 de la Secretaría General del Servicio
Extremeño de Salud (SES) regula el tiempo destinado a la realización de cursos
de formación o perfeccionamiento profesional, estableciendo el derecho al
permiso, pero percibiendo el profesional únicamente retribuciones básicas
(excepto en el caso de actividades programadas por administraciones públicas o
por organizaciones sindicales).
Desde el
Consejo Médico Extremeño de Atención Primaria (COMEXAP), constituido por todas
las organizaciones implicadas en el primer nivel asistencial (Colegios de
Médicos, Sociedades Científicas de Medicina de Familia y Pediatría y Sindicato
Médico), queremos denunciar el hecho de que la aplicación estricta que de esta
medida está haciendo el SES, obstaculiza el derecho del médico a su formación
continuada. La merma económica asociada supone una importante limitación al
acceso a cursos de formación o perfeccionamiento necesarios para la
actualización y capacitación del médico, pues a pesar del esfuerzo realizado
desde los distintos Planes de Formación en Ciencias de la Salud de la
administración extremeña junto a las promovidas por las organizaciones
sindicales, las actividades ofertadas resultan insuficientes para cubrir las
necesidades formativas de los médicos extremeños.
La formación
continuada que se promueve desde los Colegios de Médicos y las Sociedades
Científicas, es una formación acreditada de calidad, regulada y evaluable. Una oferta formativa que desde hace muchos
años viene complementando, junto a la ofertada por la administración extremeña
y sindicatos, una parte muy importante de las necesidades formativas de los
médicos. Es lo que la Ley 30/1992 de las Administraciones Públicas reconoce en
su artículo 15 como “encomienda de gestión”, por razones de eficacia o cuando no se posean los medios
técnicos idóneos para su desempeño, que no supone cesión de titularidad de la
competencia.
En conclusión, demandamos que desde la Secretaría General del SES, se negocie un convenio
con los colegios profesionales y las sociedades científicas médicas para que
optimice las condiciones de aplicación de la citada Instrucción de 8 de Mayo de
2013 del SES, de manera que no se penalice el acceso a la formación continuada
de los médicos extremeños.
Dra. Manuela Rubio González
