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CCOO critica las limitaciones a la participación de los trabajadores socios en la gestión de las cajas rurales

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CCOO ha criticado que algunos de los cambios más importantes que se pretenden introducir en la nueva ley regional de cooperativas de crédito, que entrará la próxima semana en la Asamblea de Extremadura para su debate, limitarán la participación los trabajadores socios en la gestión de las cajas rurales, a pesar de que éstas son entidades de carácter social.

Para el sindicato es además muy difícil entender que algunas de las enmiendas que más restringirán los derechos de los trabajadores hayan sido presentadas por el grupo parlamentario de IU, teóricamente una fuerza progresista.

 

Desde CCOO no comprenden que una fuerza política como IU pretenda restringir por ley, en empresas de economía social, la participación y control de los trabajadores sobre sus órganos, sus decisiones y sus estrategias, en vez de fomentarlos.

 

Limitar la delegación de votos entre socios trabajadores de las cooperativas de crédito, esencialmente las dos cajas rurales, y no hacerlo entre los socios que no son trabajadores genera una situación que, por un lado, es injusta, porque crea socios de primera categoría y socios de segunda, y, por otro lado, es antisocial, porque reduce la capacidad los empleados en la toma de decisiones y en la gestión de sus entidades.

 

Esta enmienda de IU contiene además una perversión ideológica: dar por hecho que es en el seno de plantilla de las cajas donde se producen distorsiones o manipulaciones para el control de estas entidades.

 

Esta visión negativa de la participación de los trabajadores resulta aún más llamativa cuando procede de un partido de izquierdas.

 

El sindicato, en su defensa de la clase trabajadora y de la economía social y cooperativa, no puede ni compartir ni admitir esta concepción antisocial, porque incluso pone en cuestión los principios de la gestión democrática.

 

Hay otra enmienda de IU que según CCOO iría en contra de los trabajadores de las cajas rurales. Se trata de impedir a aquellos trabajadores que sean socios, la posibilidad de formar parte de la comisión de control de la  entidad, en otra clara discriminación por su condición de trabajador.

 

Por otra parte, CCOO ha lamentado que la tramitación de esta ley se haya hecho como decreto-ley cuando no hay causas de urgencia que lo justifiquen. Convenía que la nueva norma partiera de un debate pausado y riguroso ante la difícil situación de futuro en las que se encuentran las cajas extremeñas.

 

Sin embargo, se ha preferido un trámite de urgencia evitando así el preceptivo informe de tres instituciones que deberían tener mucho que decir ante esta ley como son el Consejo Superior de Cooperativismo de Extremadura, el Consejo Económico y Social y el Consejo Consultivo de Extremadura.


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