Se están construyendo muros de protección para reducir los efectos de futuras crecidas y desembalses de los ríos
Fue a finales del mes de marzo del pasado año cuando las las lluvias y el desbordamiento de los ríos Guadiana y Guadámez ocasionado por los desembalses provocaron una riada que inundó la carretera en varios tramos, hundiendo y arrancando su plataforma y dejando incomunicados los núcleos de población de Valdetorres y Yelbes.
En aquél momento se acometió una actuación de emergencia que permitió la rápida reapertura del tráfico. Esta actuación, en la que se invirtieron 90.000 euros por parte de la Diputación pacense, consistió en movimientos de tierra, retirada de escombros, formación de la plataforma y reposición del firme. Posteriormente, la institución provincial decidió acometer el pleno acondicionamiento del tramo afectado, que es la actuación que actualmente está en marcha y que previsiblemente concluirá en el próximo otoño.
Los trabajos que se están desarrollando consisten en el establecimiento de un nuevo firme de la carretera y la reposición de la pertinente señalización horizontal y vertical. No obstante, la singularidad de esta actuación es la construcción de muros y mantos de protección de la carretera, que reduzcan el impacto de futuras crecidas y desembalses de los ríos, y el diseño de nuevos marcos de hormigón para mejorar el drenaje de las aguas.
El acondicionamiento completo de la carretera supondrá una inversión de un millón de euros que, como ha explicado Cortés, han tenido que ser asumidos íntegramente por la Diputación de Badajoz “ante el rechazo del Gobierno Central para que la actuación se incluyera dentro de la línea de subvenciones por daños ocasionados por catástrofes naturales”, según indica la propia institución provincial.