Las ranas, una de las 11 comedias de Aristófanes que se conservan íntegras, es el quinto espectáculo de la 60 edición del Festival de Mérida, la segunda teatral y la primera comedia que llega al Teatro Romano, en el ecuador del certamen.Para Pepe Viyuela: “Cada noche en Mérida es un regalo que guardas para siempre en tu memoria”
Unos 1.800 espectadores, entre los que se encontraban la consejera de Cultura Trinidad Nogales y el alcalde de la ciudad Pedro Acedo, acudieron ayer a ver el viaje del dios Baco con Jantías al inframundo para devolver a Eurípides a la vida. El objetivo final de Baco es engrandecer la comedia y la sociedad de la época, pero tras un camino trufado de enredo, exageraciones grotescas y mitología burlesca, las cosas no salen como estaban planeadas.
La adaptación que Juan Dolores Caballero hace del texto es más libre que la obra original, ya que el texto de Aristófanes es difícil de entender, puede enmarcarse dentro de lo atípico y resulta incluso aburrido y poco teatral, como dijo en la presentación de Las ranas el director. Por eso, aunque se suprimen algunos pasajes, la comedia sigue siendo fiel a la propuesta de Aristófanes.
La complejidad radica en que se trata de un texto dividido en dos partes, donde el conflicto se diluye entre el viaje que emprende Baco en busca de un poeta y el juicio que se hace a Eurípides y Esquilo en el Hades para saber cuál de los dos se merece el premio a mejor poeta, proceso en el cual Baco ejerce el papel de juez.
En cuanto a la puesta en escena, la propuesta de Las ranas se acerca al mundo grotesco y el lenguaje del clown se ve reflejado en esta adaptación de Aristófanes. Juegos escénicos propios de la comedia, así como cierta ironía en las evocaciones de la tragedia y su retórica, se pueden ver también entre los elementos más personales que aporta el director a su versión.
El elenco encargado de representar la obra es de lo más televisivo, y está encabezado por Pepe Viyuela, que encarna al dios Baco, el cual en la obra, aburrido de la ínfima calidad de los montajes teatrales de su tiempo, decide bajar al Hades acompañado por su esclavo Jantias, papel interpretado por Miriam Díaz-Aroca. Selu Nieto, en el rol de Esquilo, Beth como la Narradora, Carles Moreu como Hércules y Éaco, Susana Hernández en los papeles de Mueta y Plátana, y Alfonso Rodríguez como Caronte y Eurípides, completan una nómina de intérpretes cuyo trabajo es correcto.
Pero merece destacarse el trabajo de Miriam Díaz Aroca y Pepe Viyuela, auténticos protagonistas de la obra, que están la hora y media en el escenario. Y de forma esecial a Pepe Viyuela, que sostiene todo el peso de la obra y al que estamos deseando ver ya en Mérida con un trabajo alejado de la comedia, al que nos ha acostumbrado en su paso por el Festival.
La cantante Beth, como narradora, se encarga de guiar al espectador, acompañada de una banda de músicos pop rock e indie, que contrastan con el texto clásico de Las ranas, que cuenta también con cuatro figurantes extremeños Sergio Fernández, Omar Morán, Santiago Rivera y Wenceslao Maya.
El director Juan Dolores Caballero, que salió a la carrera al escenario para recoger los aplausos del público, no quiso hacer declaraciones al final de la representación y dejó todo el protagonismo para los actores.
Así, Pepe Viyuela señaló que “las valoraciones se pueden hacer desde el corazón o desde el cerebro y yo ahora la hago desde el corazón. Cuando llega un estreno vuelcas sobre el escenario toda la ilusión y las ganas, y quizás mañana pueda hacer una valoración más cerebral”.
Añadió que ahora tocaba escuchar a los espectadores su valoración, pero que de todas formas, “estoy muy contento porque cada noche en Mérida es un regalo que guardas para siempre en tu memoria, y esta noche ha sido una más, preciosa”, por lo que dio las gracias al público por sus aplausos finales.
Unos aplausos que agradeció también Mirian Díaz Aroca, que dijo sentirse “bendecida por este escenario, milagroso y maravilloso y por un público entregado”. Dio las gracias a Mérida porque sus aplausos eran la recompensa “al trabajo, esfuerzo e ilusión que hemos puesto en la representación”.
La cantante Beth, que dijo no saber que había que hablar al final de la representación, señaló que había sido “un placer y un privilegio haber estrenado en Mérida”.
El productor ejecutivo Rafael Herrera dio las gracias al equipo artístico, “que se ha volcado y entregado, y a todos los que han apostado por este proyecto y lo han hecho posible”.
No hubo para más, los protagonistas parecían querer celebrar cuanto antes el estreno, y Díaz Aroca invitó a todos a comer y a beber.
La comedia de Aristófanes se podrá ver hasta el domingo 27 de julio.