Desde el GM Socialista denuncian » el lamentable trato y falta absoluta de compromiso por parte del equipo de gobierno del PP y más concretamente del Delegado de Deportes hacia uno de los clubes deportivos de más solera en nuestra ciudad».
En una nota enviada a Redacción DEx, se señala que parte de los más de 100 integrantes del Club Tenis Mérida, se nle ha hecho saber a los socialistas una serie de reclamaciones que llevan haciéndole a la Delegación de Deportes desde hace varios meses, » y las cuales no han sido atendidas por falta de compromiso del Delegado Perdigón».
Ya hace meses denunciaron desde el GM Socialista » las lamentables reformas (inversiones con dinero público) que se habían realizado en las pistas de tenis de nuestra ciudad, y más concretamente en las instalaciones de la Paz (ejemplo de la nefasta gestión del PP en nuestra ciudad). Pero lo más grave de todo es que actualmente ninguna de las pistas de tenis de nuestra ciudad cuenta con focos de luz para poder practicar Tenis en horario nocturno, horario más utilizado por la mayor parte de practicantes de este deporte «.
Ante esto, el propio Delegado de Deportes se comprometió ante la junta directiva del club a que eso se solucionaría inmediatamente; pues han pasado casi 2 meses y no se ha producido ni un solo movimiento para solucionar esta deficiencia. De nuevo demuestra el Partido Popular dejadez, desidia e incapacidad.
El PSOE denuncia que » Este hecho vuelve a poner de manifiesto la falta de una política de mantenimiento adecuado de las instalaciones, así como la falta de rigor y compromiso del Delegado de Deportes, el Sr Perdigón; es decir falta de compromiso con los servicios públicos» .
Desde el Grupo Municipal Socialista exigen » el arreglo inmediato de estas instalaciones deportivas, así como la puesta en marcha de políticas más efectivas en el mantenimiento en todas la instalaciones municipales.»
Como se puede observar con esta denuncia, la ciudadanía exige el arreglo de instalaciones públicas, y no la inversión del dinero de los ciudadanos en obras faraónicas cuyo único objetivo es el de conseguir rédito electoral.