El sindicato UGT Extremadura ha considerado que pese a la «sustancial subida» de ocho décimas en los precios de octubre en Extremadura con respecto al mes anterior, «no oculta un escenario aún con riesgo deflacionista», ya que la inflación interanual «persiste en su negatividad».
Para UGT, «sorprende el crecimiento de los precios en algunos epígrafes como los alimentos, incluso el vestido, poco acordes con la tónica económica general», por lo que considera necesario un acuerdo de negociación colectiva que «priorice la ganancia de poder de compra de los salarios para asegurar la reactivación del consumo».
De esta forma valora UGT, los datos del Índice de Precios al Consumo (IPC), que destacan la subida de ocho décimas en octubre en Extremadura con respecto al mes de septiembre, mientras que en tasa internual, se ha registrado un descenso de tres décimas con respecto a los precios de octubre del año anterior
Ante estos datos, UGT apunta que «nuevamente en octubre se produce un crecimiento coyuntural de los precios del vestido y el calzado por el comienzo de la temporada de invierno», y que según señala, «vuelve a incidir en mayor medida en nuestra Comunidad (13%) que en el conjunto nacional».
También destaca «sobremanera», a juicio de UGT, la subida del componente de los alimentos (0,5%) poco habitual en estas fechas, la enseñanza (0,5%), unos incrementos que «conviven en Extremadura con una contención coyuntural de los servicios telefónicos (-1,5%) y los carburantes (-1%)».
NIVELES MINIMOS
Así, señala que a falta de dos meses para finalizar el año, la inflación en España (-0,4%) y en Extremadura (-0,3%) sigue en «niveles mínimos», lo que, a juicio del sindicato, impone la «necesidad imperiosa de cambiar la política económica priorizando políticas de crecimiento y empleo, porque nuestro verdadero problema no son los precios, sino el desempleo».
En todo caso, añade que un «escenario deflacionista en nuestra economía, asediada de amenazas internas y externas, sería un escenario muy complicado de cambiar», y apunta que «a pesar del triunfalismo del Gobierno, la supuesta reactivación de la economía que apuntan algunos indicadores macroeconómicos no parece haberse trasladado a los hogares españoles».
Considera UGT que el consumo de los hogares no puede recuperarse básicamente por tres razones, como son por la pérdida de poder adquisitivo de sus rentas, la falta de fluidez del crédito y el todavía elevado endeudamiento al que están sometidos.
Por todo ello, propugna un nuevo Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) en el ámbito nacional que recoja una «política salarial acorde con la nueva etapa», de modo que los salarios «ganen poder de compra y contribuyan a la reactivación de la demanda y a la creación de empleo en nuestra región y en nuestro país».