El Gobierno afirma que proyectar a Extremadura es una inversión prioritaria y el PSOE destaca que con este concierto ha malgastado el dinero público.
La diputada socialista Inés Mireya Conejero preguntó al Gobierno de Extremadura sobre la repercusión del concierto de Woody Allen, puesto que según afirmó, el Gobierno ha tirado 163.650 Euros para el «autobombo», un broche de fin de año realizado de espaldas a la Extremadura Real que sufre «los sinsabores de haberle dado un voto de confianza» a Monago. Destacó que «tirar» esta cantidad de dinero sí es poner «palos en las ruedas» porque se ha malgastado el dinero público para un «caprichito» de éste presidente que «ha salido muy caro», de la misma forma que el patrocinio a Pablo Alborán; porque el impacto ha sido 0 porque no hubo repercusión social.
La encargada de contestar al PSOE fue la Consejera de Educación y Cultura, Trinidad Nogales, quien tras hacer un repaso a los medios de comunicación que se hicieron eco de la noticia, destacó que Badajoz y Extremadura se han proyecto como «referente cultural», del mismo modo que lo hizo con los premios Ceres o con el Festival Contempopránea, afirmando que como en cualquier otra inversión se ha realizado «con transparencia».