Los socialistas cacereños han afirmado que la ciudad de Cáceres ha sido la «gran olvidada» en el proyecto regional del presidente del Gobierno de Extremadura, José Antonio Monago, al considerar que no se ha realizado un equilibrio de las inversiones en la región y piden que se apueste por Cáceres.
Así lo ha expresado el candidato socialista a la Alcaldía de Cáceres, Luis Salaya, quien ha estado acompañado por el diputado regional en la Asamblea de Extremadura, César Ramos, y por el portavoz municipal, Vicente Valle, que han valorado las decisiones adoptadas en el Consejo de Gobierno extraordinario celebrado esta semana en Trujillo.
Salaya ha ejemplarizado ese «abandono de Cáceres» con extractos de documentos del Partido Popular (PP) en el que se detallaban que acciones como el Punto de Encuentro Familiar de Don Benito, o la conmemoración del Reino de Badajoz se habían cumplido, mientras en la capital cacereña el inicio de las obras de la Ronda Sur Este está en proceso, o la «deuda histórica» del nuevo hospital se encuentra en fase de ejecución, presupuestada.
Así, ha pedido que se priorice la puesta en marcha del AVE, un punto en el que han asegurado insistir «mucho» porque la ciudad «lo necesita» para comunicarse y ha exigido que la alcaldesa de la ciudad, Elena Nevado, «lo pida» instándole a que «viaje menos a Madrid y más a Mérida» y ponga a Cáceres en «el mapa».
El candidato a la alcaldía ha subrayado que los socialistas no están «en contra» de que se realicen inversiones en otros lugares de la región pero han pedido que haya un equilibrio de las mismas y se «apueste» por Cáceres.
Asimismo, ha añadido que el PP se ha referido a la ejecución de un ‘eje bio sanitario’ como un «eufemismo» en favor de un proyecto que se lleva en parte a Badajoz abandonando de nuevo la ciudad cacereña, algo que según ha afirmado le «preocupa» porque no es algo puntual sino una «constante» en el gobierno local.
Salaya ha dicho que el PP «ha dado por perdida la victoria política en Cáceres» y centra su atención en otras localidades. Por ello, ha lanzado la pregunta de «dónde está Nevado» a lo que ha añadido que la alcaldesa no tiene peso en su gobierno, al mismo tiempo que le ha instado a sentarse para hablar sobre la situación de la ciudad.
DEBATE PÚBLICO CON NEVADO
Así, le ha retado a realizar un debate público donde lo único que han solicitado es que haya público y han asegurado que se adaptarían al día que Nevado dijera, para comprobar si es «cierto» lo que afirma el portavoz de su Gobierno, Valentín Pacheco, de que tiene a Cáceres en «la cabeza».
Salaya ha asegurado que igual que «perdimos» la capitalidad cultural, también se pierde ahora el referente como Ciudad de la Salud. Lo que, según ha dicho, demuestra que «este gobierno está dejando a Cáceres sin futuro».
Por su parte, el diputado regional en la Asamblea de Extremadura, Cesar Ramos ha asegurado que su «indignación» ha ido en aumento al comprobar cómo se ha olvidado a Cáceres y ha instado a que las autoridades públicas hagan «algo».
Además ha añadido que los socialistas han propuesto medidas durante la legislatura pero ha dicho «no» ver a los populares reivindicar lo que «es justo» para Cáceres y su provincia. Asimismo, lo ha ejemplarizado explicando que al final del gobierno socialista, el hospital de la ciudad estaba casi terminado, el Garaje 2.0 estaba finalizado y el proyecto de Ciudad de la Salud estaba planteado, algo que, según ha dicho hoy, se ha «tirado a la basura».
Al igual que Salaya, ha subrayado que entiende las necesidades económicas que obligan a retrasar acciones en las localidades, pero ha asegurado sentirse «indignado» porque ese retraso se dé en Cáceres mientras que en otras ciudades los proyectos se ralentizan pero no se paralizan.
Asimismo, ha expresado que tiene la sensación de que Monago piensa que a Cáceres se le había dado «más de lo que merece» y ha preguntado qué tiene que pasar para que la alcaldesa, Elena Nevado, se «plante» ante el presidente extremeño.
Vicente Valle ha reiterado que el PSOE ha realizado, desde la oposición, propuestas que han sido denegadas por el gobierno y ha dicho que se considera democrático por lo que desea que Nevado «esté presente en las elecciones». Sin embargo, ha concluido que «si la alcaldesa tuviera dignidad política se quedaría en casa».
