Digital Extremadura
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  Si días atrás hablábamos de los gatos, no queda otro remedio que sacar hoy, último día de la Cuaresma, a los perros en estas páginas.  El motivo no es otro que la batuta que me ha dado mi íntimo, el que no se casa ni con su sombra, con aquellos versos de: “Perro de nadie,/cimarrón, callejero,/flaco y acosado por las pulgas,/de color descolorido,/frecuentador de muladares,/hijo de desconocida madre…”  Y me relataba el amigo, siempre con sus poemas a cuestas, que vertebró aquella composición poética a raíz de que, hace ya la tira, se dejara caer un Sábado de Pasión por la siempre muy noble y leal villa de Las Huertas de (¿)Nimas (no es que sea villa ni de “Nimas”, pero ya se explicarán los porqués en otra luna).  Años de Universidad y de locura.

 

     El recorrido desde Cáceres, como cosa acostumbrada, en aquel desvencijado auto del trujillano y nunca bien llorado Alfonso Naharro, maestro entre los maestros y que nos dio la alternativa a un montón de universitarios.  Al parecer, viajaba con ellos una tal Patri Solís, legítima hija de los berrocales, de hermosos ojos entre verdes y azulados, cabello tirando a negro y llamativo lunar encima de su pecho izquierdo.  Hacían muy buenas migas y se hipnotizaban mutuamente mi colega y ella.  Con Patri, la cosa podía haber ido a más, pero en unas fiestas de la Virgen de la Soterraña, patrona de Madroñera, en la canícula de agosto, el asunto se torció y ella y mi amigo tomaron caminos diferentes.

 

      El caso es que, junto al camposanto de Las Huertas, Patri recogió un perro abandonado.  No era de nadie y estaba en estado lastimoso.  Aún no había nacido la Asociación Protectora de Animales de Trujillo, que no vería la luz hasta junio de 2013.  La guapa moza lo desparasitó, lo aseó, se hizo uña y carne de él y dio por bueno el resultado de la encuesta emprendida por la Associated Press-Perside.com, una de cuyas conclusiones afirmaba que muchas mujeres quieren más a sus perros que a sus parejas.  Y es que no es para menos si hacemos caso a la celebrada veterinaria y experta en comportamiento animal, Karen Sueda: “Los perros son grandiosos, ya que nos brindan su apoyo incondicional.  Nunca nos darán la opinión equivocada y siempre están ahí para nosotros”.

 

     Del apuesto poeta escocés Lord Byron dicen que perdió la virginidad a los diez años y que amó a docenas de mujeres y a varios hombres.  Pero a nadie quiso con tanta fuerza como a su perro terranova “Boatswain”.  Cuando enfermó de rabia, el poeta dejó todo por estar a su lado.  Al morir, levantó un mausoleo para enterrarlo.  Una placa lo recuerda con la siguiente esquela: “Aquí reposan los restos de una criatura que fue bella sin vanidad, fuerte sin insolencia, valiente sin ferocidad, y tuvo todas las virtudes del hombre y ninguno de sus defectos”.  Ya lo decía el francés Paul Valéry, el representante máximo de la poesía pura: “El perro ha hecho del hombre su Dios.  Si fuera ateo, sería el animal perfecto”.

 

     Comenta mi siempre polémico compañero que Corey Ford, conocido humorista, guionista y amante de la naturaleza estadounidense, dijo que “debidamente entrenado, el hombre puede llegar a ser el mejor amigo del perro”.  No cree, por ello, mi colega que el arráez que capitanea actualmente la nao “Extremadura” por estos mares belloteros haya sido entrenado suficientemente para ser un íntimo de los canes.  No ha aprendido a ladrar en su momento y, ahora, lo hace con cajas destempladas, arremetiendo contra la Confederación Regional Empresarial Extremeña (CREEX), contra la Confederación de Entidades para la Economía Social y Autónomos de Extremadura (CEPES) y contra los sindicatos UGT y CCOO.  Y es que nuestro (o, mejor, vuestro) José Antonio Monago y Terraza, ha presentado una denuncia ante la Fiscalía Anticorrupción, acusando a tales agentes sociales de fraude en los cursos de formación.

 

     Lo triste del caso es que le ha seguido, con metálicos ladridos de perrita mona, su consejera de Empleo, Mujer y Políticas Sociales, la bien plantada María Ángeles Muñoz Marcos.  Una lástima que una bella hembra, con unas grandiosas pupilas zarcas, de esas que atormentan a mi querido socio, haya ladrado a los cuatro vientos que se ha cometido “un fraude a gran escala”, donde andan bailando tres millones de euros.  Más le valía a María Ángeles que hubiera leído a Virginia Woolf y, de modo especial, su obra “Flush”, nombre de aquel perro que amaba la libertad y corría a sus anchas por los campos y solo ladraba cuando era realmente necesario.  Ganas tontas de meterse en absurdos berenjenales.  No creemos que la agraciada consejera sea una mujer-Perro, habiendo nacido bajo ese cánido signo del horóscopo chino.  De serlo, se habría mordido la lengua y no habría emitido un solo ladrido.

 

     Mi caro camarada sí tiene padre, madre y un perrito que le ladre, y me relata que la razón por la cual los perros tienen tantos amigos es porque mueven sus colas en lugar de sus lenguas.  No es de extrañar, por lo tanto, que el presidente y su consejera pierdan amigos o que otros conocidos les echen en cara lo que, a todas luces, parecen oscuras y rasputinianas intrigas y acusaciones.  Miguel Ángel Coque Durán, secretario de Formación y Empleo de CCOO y conmilitón en heroicas batallas de mi irredento amigo, aparte de alertar que más del 85% de las contrataciones realizadas en Extremadura en el último medio año no superan el mes de duración, ha levantado la voz para aseverar que la Administración regional adeuda a su sindicato unos 600.000 euros, correspondientes a planes de formación ejecutados desde 2011.  Además, junto el secretario general de CCOO en Extremadura, Julián Carretero, y la secretaria de organización, Encarna Chacón, acaban de verter palabras más duras que el pedernal contra el jefe de los remeros que navegan por estos encinares: “Manda narices de quien no ha justificado viajes y de quien hace denuncias de persecución o persecutorias ante la policía.  Parece mentira que un personaje que está en tela de juicio porque ha hecho de la mentira y de la propaganda la acción de su gobierno quiera emponzoñar a dos meses de las elecciones la política de esta región”.

 

     Mientras tanto, leemos en periódicos y revistas que en el pueblo de los “Calabazones”, o sea, en Don Benito, donde venden como reliquia gastronómica el ajo de calabaza, la historia entre Christian Grey y Anastasia Steele, protagonistas de la tan traída y llevada película “50 sombras de Grey”, ha levantado la líbido de los más frígidos de la comarca y causado un furor inusitado.  Como rosquillas se expenden, ahora, látigos, fustas, antifaces y esposas.  La tienda “Deseos” de tal localidad pacense no da abasto.  Hasta los perros dicen que andan aullando todas las noches a la luna y en perenne celo.  No sabemos si la perrita “Lola” anda metida en esos ardorosos fregados.  La “Lola” es el ojo derecho de mi  compañera en quehaceres pedagógicos Alicia Gallardo Fernández, “calabazona” de pro, aunque por sus buenas hechuras no creemos que haya recibido jamás calabazas.

 

     Aúllan, también, otros perros en lontananza.  Saben que solo quedan seis jornadas dominicales para que se abran las urnas.  Ojo con los que se disfrazan de chuchos y no escucharon a Corey Ford.  Bien dice el refrán que “al perro que es traicionero, no le vuelvas el trasero”.  Y ojo con sus marcas blancas.  Pero lo más probable es que tales canes se encanijen de aquí a mayo y ya se sabe: “al perro flaco todo se le vuelven pulgas”.  Así que ojo con dar el mejor bocado al perro más desmedrado.


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