El director gerente del SES, Joaquín García Guerrero, ha presentado la Guía de prevención del síndrome de Burnout para los profesionales del Programa Regional de Cuidados Paliativos de Extremadura.
El Burnout, o “síndrome del trabajador quemado”, es un síndrome de cansancio emocional, despersonalización y una menor realización personal, que se da en aquellos “individuos que trabajan en contacto con usuarios y que se caracteriza por un progresivo agotamiento físico y mental”, según explicó García Guerrero.
La guía se enmarca en el Plan de Prevención de Burnout, incluido en el Programa regional de Cuidados Paliativos, indicó el gerente del SES, quien señaló que toda la elaboración ha sido dirigida por el personal que trabaja directamente en los equipos de soporte de cuidados paliativos.
Joaquín García explicó que los objetivos de la guía son “promover el autocuidado y reconocer y reforzar estrategias de afrontamiento ya existentes, para mantener aquello que ya está funcionando”, y destacó que una de las principales novedades que aporta es la incorporación de una libreta personal de trabajo para la prevención, donde el personal podrá reflexionar sobre su situación y sobre las medidas que podrá tomar para mejorar en su autocuidado.
La guía ya puede consultarse en la página web del Observatorio Regional de Cuidados Paliativos, y de la misma podrán beneficiarse no solo los profesionales extremeños de cuidados paliativos, sino que, previo registro en la página del Observatorio, cualquier otro profesional del Estado tendrá acceso a la misma.
El gerente del SES destacó la gran implicación que los profesionales de cuidados paliativos muestran día a día en la importante labor que realizan, en la cual se conjugan “la entrega, la vocación y la humanidad” y añadió que iniciativas como la de esta guía permiten no solo cuidar a los pacientes y sus familiares, sino también a los trabajadores.
El coordinador regional de Cuidados Paliativos Luis Lázaro Pérez, indicó que este documento es un punto de partida y que deberá incorporar nuevas necesidades a medida que surjan y explicó que en el año 2007 se realizó una evaluación a los profesionales de cuidados paliativos para medir su situación en función del cansancio emocional, despersonalización y realización personal, con unos resultados que los situaban “en límites razonables”, debido a la existencia de buenas estrategias para afrontar el síndrome.
Por su parte la coordinadora del proyecto, Raquel Cabo Domínguez, señaló que se trata de una herramienta útil y sencilla para que todos los trabajadores de cuidados paliativos, considerados “de alto riesgo”, puedan acceder a ella y que está basada en la propia experiencia de los profesionales para el autocuidado, mediante la utilización de diferentes fichas en función de cada necesidad.