El sindicato CSI-F ha considerado que este 1 de mayo es el punto de partida para la recuperación de los derechos «arrebatados» a los empleados públicos y de las condiciones laborales y puestos de trabajo en las empresas de Extremadura.
Ha recordado cómo los empleados públicos, en los últimos cinco años, han sufrido «un elevado quebranto de sus condiciones laborales y salariales convirtiendo los servicios públicos en un escenario de recortes en toda la geografía española».
Según ha señalado, los salarios se han devaluado el 30 por ciento durante los últimos años con pérdidas retributivas de pagas extra, seis congelaciones salariales y el cinco por ciento de media en las nóminas en 2010.
Asimismo, CSI-F ha explicado que se han destruido 400.000 empleos públicos, los contratos de trabajo se han reducido considerablemente sin que se cubran las vacantes por jubilaciones y los que se han realizado se han precarizado.
En este sentido, ha apuntado que el contrato a tiempo parcial «se ha generalizado» en las administraciones mientras que los servicios públicos «perdían miles de puestos de trabajo, siendo los empleados públicos los que, gracias a su esfuerzo, han mantenido estos servicios de todos».
Por lo tanto, desde CSIF creen que «ahora es el momento de pasar página y trabajar de forma decidida en recuperar todo lo que han perdido los servicios y los empleados públicos», ya que según apunta, «no caben excusas» cuando los indicadores económicos apuntan a una recuperación económica, que el Gobierno de España no se cansa de anunciar, por lo que ha considerado que «es el momento de devolver las condiciones laborales a los que se han sacrificado para salir de una crisis, de la que no son culpables ni la han generado».
