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Efecto Verdolaga, Celina y La Troba Kungfú cierran con éxito el Festival Internacional Folk de Plasencia

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Los veratos Efecto Verdolaga, la portuguesa Celina da Piedade y los catalanes La Troba Kungfú han puesto el broche a la edición número veinte del Festival Internacional Folk de Plasencia, con sus actuaciones de este sábado en los escenarios de la Plaza Mayor y Torre Lucía.

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Los encargados de abrir la última jornada del certamen fueron los once componente de El Efecto Verdolaga, la banda de Villanueva de la Vera que animó al público que se dio cita en la Plaza Mayor.

 

   Jotas postmodernas con letras picantes, rondas minimalistas y temas de ‘Los pavos de Manolo’, su último trabajo, hicieron que la noche de clausura comenzara con mucha energía, según detalla el certamen en una nota de prensa.

 

   Como la víspera, el público abarrotó la calle del Rey, que comunica el primer escenario de la Plaza Mayor con el de la Torre Lucía, siguiendo los pasos de Veritas Nostra en una divertida escena porque la comitiva iba al ritmo que le marcaban los músicos del pasacalle Así como los tamborileros, como anfitriones, habían anunciado el inicio de los conciertos en torno a la Plaza Mayor.

 

   Celina da Piedade subió el Alentejo al escenario de Torre Lucía pasadas las 23.00 horas. Compositora, cantante e investigadora del folklore luso, llenó de dulzura el auditorio al son de ritmos portugueses.

 

   Pero lo hizo, también, con su mera presencia y sus ganas de interactuar con un público del que consiguió hasta que cantara el estribillo de Pêra Verde, uno de sus temas más populares que interpretó hasta dos veces, una de ellas para cerrar la actuación.

 

   La Troba Kungfú abrió su concierto declarando que habían llegado con intención de hacer bailar al personal y así lo hicieron. Desde que empezaron a tocar el público demostró tener las mismas ganas de música y fiesta que al principio de la noche. Los catalanes expusieron su estilo único con el que transmiten «una increíble energía sin paréntesis y que consiguieron convertir Plasencia en la capital tropical de Extremadura».

 

   Con un ritmo frenético que siguieron miles de almas en una Torre Lucía abarrotada se cerró este año la vigésima edición del Festival Internacional Folk de Plasencia.

 

   Antes de los conciertos, por la mañana, Diego Galaz, de Zoobazar, grupo que actuó el viernes, ofreció un divertido taller con instrumentos insólitos en el centro cultural Las Claras y donde demostró que «su virtuosismo musical va más allá del violín al interpretar el Ave María con un serrucho».


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