Los Delegados del Centro Penitenciario de Cáceres han iniciado un encierro ante la falta de funcionarios de vigilancia de interior, que ha llevado a una situación insostenible tanto en el Centro de Cumplimiento como en el Centro de Inserción Social.
Según ha informado CCOO, en estos momentos la falta de funcionarios de vigilancia es de más de un 30% de la plantilla, que ha derivado como mínimo a una situación kafkiana que está afectando a la vida personal de los funcionarios por la incapacidad de poder planificar sus descansos.
Y también con a una absoluta sobrecarga de trabajo que podría llegar incluso a problemas de seguridad y vigilancia con lo que esto con lleva en Centros de esta índole.
Si bien en la mayoría de los Centros la población reclusa ha disminuido, en este ha ocurrido lo contrario, con más de 500 internos en un Centro que tiene una capacidad media de 350 internos.
Lo que demuestra, añade el sindicato, una insensibilidad total por parte de Instituciones Penitenciarias y de este Centro Directivo que no son capaces de solventar este problema.
Por ello han decidido iniciar este encierro que casi con toda seguridad será el primero de futuras movilizaciones.
