Rubén Pozo, ex del grupo Pereza, presenta su segundo disco en solitario

Rubén Pozo, que formó con Leiva el exitoso grupo Pereza, regresa a los escenarios de Extremadura este fin de semana para presentar En marcha, su segundo disco en solitario, este viernes y el sábado en dos conciertos en la Mercantil de Badajoz y el Gran Teatro de Cáceres

El cantante, músico y compositor madrileño se lanzó a esta aventura hace cuatro años tras el descanso que se tomó la banda que le dio fama y prestigio como uno de los rockeros más admirados de la escena nacional.

De aquella época son canciones inolvidables como Lady Madrid o Margot,  igual que los miles de fans que aún conservan el dúo que formaron Rubén Pozo y Leiva.

Con 12 canciones en las que el artista vuelve a pisar tierra para hablar de historias de la calle y “de la gente”, como a él le gusta definir el público a quien se dirige, el nuevo trabajo de Rubén Pozo sonará en la sala Mercantil de Badajoz y el Gran Teatro de Cáceres. 

Ambos conciertos serán en solitario, en los que Pozo alternará las guitarras acústica y eléctrica durante más de una hora de actuación.

Para este disco, el artista ha contado con la colaboración del británico Nigel Walker en la producción, confesando que ambos “son los primeros sorprendidos de que este disco les guste tanto después de un camino tan tortuoso”. 

La biografía musical de Rubén Pozo es la de un apasionado currante de rocanrol. Aunque barcelonés de nacimiento (1975), este autodidacta de las seis cuerdas comenzó su carrera musical siendo un adolescente, en el barrio de la Alameda de Osuna, donde había crecido, ya que desde bien pequeño sus padres se instalaron en Madrid.

En un principio se colgó la guitarra para tratar de tocar las canciones que escuchaba y le llenaban; una época marcada a fuego por la visceral poética de Robe Extremoduro, pero también por el Drogas de Barricada en su faceta más sedosa, el siempre genial Kiko Veneno y en general los maestros de la composición pop-rock en castellano como Pepe Risi, Santiago Auserón, Rosendo Mercado o Sabino Méndez. Del rock anglosajón bebió de la mejor escuela, la del binomio Stones/Beatles, y se dejó encandilar con el plumaje exuberante del glam rock vía Marc Bolan y The New York Dolls.