Digital Extremadura

REGENERACIÓN Y CONSTITUCIÓN: CLAVE DE FUTURO TRAS LAS ELECCIONES 20D

OPINIÓN
Comparte en redes sociales

Tras conocer el resultado electoral no puede saberse que va a pasar y menos quien va a formar gobierno, pero si se saben algunas cosas que no van a pasar y otras que tendrán que pasar si algunos quieren ser supervivientes a estas elecciones o ser algo más que unos recién nacidos de corta vida tras las mismas.

Lo más importante es saber que la Constitución no se puede tocar sin el concurso del Partido Popular, tiene una cifra de diputados superior a un tercio del Congreso y por tanto los demás no suman los dos tercios restantes, esto unido a su mayoría absoluta en el Senado del Reino, que ahora si cobra especial valor, dado que si tiene capacidades en la reforma constitucional, es quizás el posicionamiento más concluyente tras estas elecciones y esto obliga a emprender las reformas en el marco constitucional y no contra él. Es así que frente a los que apostaban por el fin del sistema o de la apertura de una nueva transición, funesta manía esta la de los españoles de reinventarnos cada 40 ó 50 años, ocurre todo lo contrario. La Constitución permite emprender todas las reformas de calado social y político necesarias, pero no aquellas de carácter ideológico que no tienen relevancia en este momento salvo en las mentes o egos de algunos.

 

El sistema electoral también ha demostrado su vigencia, frente a años despotricando de la ley D’Hont por parte de fuerzas minoritarias, vemos ahora que el problema no era el método sino el ser minoritario y cuando se alcanzan número de votos importantes también se consiguen escaños. Es una lección que debemos aprender.

 

Otra cuestión general importante es la aparición, por primera vez, de un partido político de marcado contrario al nacionalismo y nacido en la pelea contra el mismo. Ciudadanos con 40 escaños, apuesta con rotundidad contra los privilegios vascos y navarros o contra los excesos de la autonomía catalana y lo hace sin complejos y sin pasado, descolocando a los prebostes independentistas, que suman a duras penas 20 escaños. Es una referencia importante y a tener en cuenta.

 

Entrando en el asunto partidista, encontramos un escenario a múltiples bandas, parecido pero no igual a los italianos, en el que caben gobiernos estables no mayoritarios con apoyos superiores a los 160 escaños, no olvidemos que la UCD gobernó con cifras parecidas, pero tendremos tiempo de entrar en esa materia, más importante parece esta noche analizar a los que necesitan sobrevivir a estas elecciones, PP y PSOE, y los que necesitan, tras un parto de éxito, no morir en la infancia, Podemos y Ciudadanos.

 

Para el Partido Popular se acabó el tiempo,  o se regenera decisivamente o camina a la desaparición. La corrupción externa y la interna, y nos explicaremos, le ha restado apoyos y los que ha recibido lo han sido por la gestión económica. La corrupción externa no se puede tapar, ni se pueden mandar mensajitos ni decir que no se está informado del asunto, como ha pasado con el comisionista diputado por Segovia, sencillamente esos tiempos acabaron, ahora si se tiene en cuenta y no todo vale. Pero más grave aún es la corrupción interna, entendida esta como modelo de gestión del partido, que lo han convertido en una máquina sin alma y sin ilusión militante. Oscuros personajes que llevan 25 ó 30 años en las poltronas sin haber demostrado nada en la vida civil, instrucciones de arriba incluso para elegir pequeñas Juntas Locales, dedazos de todo tipo para Congresos Nacionales, Regionales y Provinciales,  han hecho del Partido Popular un partido endogámico y de llevarse bien con quien manda, que tras esto tiene que soltar riendas y permitir que el partido se regenere de abajo a arriba en procesos limpios y no dirigidos de renovación. Lo contrario es morir.

 

Para el Partido Socialista empieza el tiempo de crear un discurso de centro izquierda, constitucional y definido que permita atraer a los votantes del centro e incluso del centro derecha y recuperar votos por la izquierda. Un discurso basado en la sensibilidad social, en la definición de un proyecto nacional lejano de aventuras. Pasó el tiempo ya del PSC y sus veleidades soberanistas, y soportado fundamentalmente en el rigor, sobriedad, conciencia, seriedad y ejemplaridad que el socialismo ha sabido mantener como impronta desde Don Julián Besteiro hasta ha fecha. Los españoles ha detectado que la corrupción externa en el PSOE, no ha sido de partido como en el Partido Popular, sino de gente que se ha aprovechado del partido para realizarla, es una sutil distinción que hace posible un discurso socialista que es imposible, con los dirigentes actuales, entre los populares.

 

Para Podemos llega el momento de definir un partido en un ámbito que va desde la izquierda a la extrema izquierda, habiendo conseguido enterrar definitivamente a antiguallas como Izquierda Unida, que no era otra cosa que un Partido Comunista de España muy radicalizado que pasará a la historia por su contribución a la transición y que no supo reconvertirse, o simplemente desaparecer, tras descubrirse que eran las dictaduras comunistas, mejor dicho que son, pues algunas siguen vigentes en la actualidad. Podemos, como Ciudadanos, tiene que implantarse como partido y eso no es fácil, aunque es más sencillo con su número de diputados, pero veremos como se definen sus sensibilidades, tiene cinco marcas en toda España y puede constituir hasta cinco grupos parlamentarios. Los diputados catalanes, con marca propia, pueden tener otros puntos de vistas que, por ejemplo, la diputada por Badajoz. SI esto no se soluciona bien, aparte del desembarco de cuadros interesados que llegarán, pasó en UCD, pasó en el PSOE y pasó en el PP, al olor del éxito; podemos ver una disgregación de esta opción que habría muerto con corta edad.

 

Por último Ciudadanos tiene que construir, como Podemos, un partido, un partido de centro que le permite mayor cintura que todos los demás: Podría estar en un gobierno con el PP, o con el PP y el PSOE, o con el PSOE y con Podemos. Es la centralidad absoluta. Pero aún con 40 diputados construir de la nada un partido no es fácil y puede pasarle como ocurrió con UPYD, que hoy también ha pasado a la historia. Sus problemas son los mismos que Podemos pero cuidado con aquellos llegados desde el Partido Popular por luchas intestinas, la disciplina en Podemos es mayor, es un partido construido por profesores universitarios, por Doctores en su mayoría, con unos principios de organización muy sólidos. Ciudadanos es otra cosa, es un partido de aluvión, y en el arrastre tormentoso viene todo revuelto. Cuidado dado que la mortalidad infantil en política existe.

 

Del gobierno hablaremos otro día.


Comparte en redes sociales

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *