El presidente de la Fundación Caja de Extremadura, Víctor Bravo, y el director general, Antonio Franco, han hecho entrega en Cáceres de los tradicionales aguinaldos de Navidad a las asociaciones sin ánimo de lucro cuya labor social y humanitaria está destinada a la población más vulnerable. Una iniciativa solidaria que se remonta a los orígenes de la entidad.
Las asociaciones Cáceres beneficiarias de estos donativos han sido la Asociación Católica Internacional de Servicios a la Juventud (ACISJF), que trabajan a favor de los colectivos más desatendidos y empobrecidos; los Hermanos de la Cruz Blanca, congregación organizada en casas familiares, como pequeñas residencias donde viven religiosos y enfermos, acompañados por voluntarios, intentando crear un ambiente de hogar y las Hermanitas de los Pobres, congregación que tiene en la actualidad casas en Cáceres y Plasencia para la atención a personas mayores.
Asimismo, se ha hecho entrega del aguinaldo a las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, institución religiosa al servicio de personas marginadas, vinculada a la comunidad internacional fundada en el sigo XIX por San Vicente de Paúl y Santa Luisa de Marillac, en Cáceres también regenta, entre otras obras, el comedor de transeúntes de la ciudad.