El sindicato PIDE está enormemente orgulloso de todos los docentes de Extremadura. Nuestros maestros y profesores son dignos de aplauso por el enorme esfuerzo que han realizado, están realizando y realizarán para conseguir lo mejor de todos los alumnos. De la noche a la mañana los docentes han concebido, casi de cero, un sistema de enseñanza-aprendizaje no presencial, a pesar de la brecha digital y social existente. Y lo han hecho solventando las incidencias a medida que se iban produciendo, aprendiendo e investigando para dar el mejor servicio posible a sus alumnos. Todo un despliegue de profesionalidad y compromiso que es justo reconocer.
Recordamos a la administración educativa que la programación es una de las tareas docentes que se ha realizado al inicio de curso, a la cual maestros y profesores se deberían limitar flexibilizando contenidos y metodologías y que, en todo caso, estas modificaciones que ahora se piden de manera expresa y con premura, únicamente deberían ir reflejadas en la memoria final de curso, una vez finalizada la atención educativa al alumnado, que en estos momentos es lo más importante.
Hay que tener en cuenta que el alumno no puede continuar el mismo ritmo en casa que en el colegio y que es imposible llegar a todos los alumnos de forma normalizada: ni la red llega a todos los lugares por igual, ni en todos los hogares hay conexión a internet, ni todos disponen de ordenadores adecuados y, en algunos casos, los docentes están llamándoles diariamente desde sus teléfonos personales para que puedan avanzar, a pesar de las carencias, en su aprendizaje. Necesitamos la colaboración de las familias, pero no haciendo la función de los docentes, sino como padres responsables del control de un trabajo que solo sus hijos, nuestros alumnos, deben hacer.
Ahora que sabemos que el estado de alarma se va a prorrogar quince días más, es urgente que la Administración haga un esfuerzo por mejorar la coordinación de los centros educativos, confeccionando un sistema de trabajo igual para todos, de tal manera que alumnos y padres perciban este tipo de enseñanza sobrevenida como una continuidad de la anterior, no como piezas deslavazadas de un puzle. Dado que los docentes y las familias están funcionando con un sistema de educación a distancia improvisado de la noche a la mañana, es importante ser conscientes de la necesidad de apoyar tanto al profesorado como a las familias a adaptarse a la nueva situación. Por este motivo, pedimos mesura a la Administración, flexibilizando la entrega de la adaptación de las programaciones y reduciendo a la mínima expresión las tareas burocráticas Sin excepción debemos contribuir positivamente a mejorar la organización de la comunidad educativa: alumnado, familias y docentes. Desde PIDE estamos convencidos de que con la colaboración de todos saldremos reforzados y cohesionados como colectivo, familia, sociedad y comunidad.
Aprovechamos para dar las gracias desde el sector docente a los trabajadores de la Sanidad Pública, de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y de todos los demás sectores que están en sus puestos de trabajo luchando contra esta epidemia y cubriendo las necesidades básicas de todos.
PIDE
