¿Saben lo que creo que se debería hacer? Ir a cuánta manifestación sea atinada y
necesaria por las circunstancias sociales que vivimos pero al mismo tiempo acercarse a
los/las son cargos públicos que van a ellas y exigirles medidas concretas en relación al
hecho y problemática sobre el que se están manifestando.
Yo tuve una amiga que se declaraba altamente contemplativa. “Soy así (me dijo muchas
veces) no como tú, que eres pura actividad”. La definición que hacía de ella misma le
servía de coartada, yo creo que inconscientemente, en momentos en los que no tomaba
decisiones en su vida y en su cargo, por no tener claro cómo hacerlo.
Pues algo de esto mismo sucede en el momento actual, que la sociedad se manifiesta en la calles
sobre algunos asuntos que le preocupan y vemos a representantes políticos de las diferentes administraciones,
manifestándose con ellos, como si ese fuese su cometido y no tuvieran la responsabilidad de hacer frente,
con los medios de que disponen, a esa misma problemática.
Por contrato electoral, que firmaron, como parte de su organización o partido.
Vivimos tiempos mediáticos en grado alto, la importancia está en la imagen, en la lectura
de la misma, de tal manera que si hay algo de gente y todo sale en los medios, se
considera que el éxito es impresionante. En las fotos y vídeos que se nos ofrecen
aparecen siempre unos políticos cuyo objetivo general es defender el bienestar de sus
conciudadanos y cuyo objetivo específico, en cada caso, es preocuparse de tomar
medidas concretas, para contrarrestar los efectos de la lacra que se denuncia por la
manifestación. Y ya. No parece haber una relación causa efecto entre el objeto de la
manifestación producida y su hacer posterior que sigue teniendo (después de la
manifestación) una tónica marcada de antemano con los técnicos correspondientes de los que disponen.
Vemos así como concejales y altos cargos se manifiestan, junto a los contribuyentes
anónimos, se hacen selfies y colocan todo ello con los comentarios pertinentes en las
redes sociales, estupendos y satisfechos, como si con ello hubieran respetado y ejercido
su propia obligación. Al final, lo que recrea el observador no sectario es que todo parece
un gran decorado, al que unos y otros se asoman, deseosos de no pasar inadvertidos,
pues en política se necesitan los votos y estos no aparecen si los depositarios de los
mismos no son reconocidos por los hipotéticos ciudadanos que ejercerán el voto.
Señores y señoras manifestantes, exíjanles más a quienes tienen el papel de
representarles. No sean tímidos o displicentes. Y señores profesionales de la política,
implíquense más en los asuntos que preocupan a la ciudadanía española, no solo
físicamente, sino también con su inteligencia, busquen resquicios que propicien que la
manifestación social acabe no siendo necesaria. Esa agudeza que revelan para ayudar a
sus allegados a obtener un puesto de trabajo a cargo de la administración, úsenla aquí,
en favor de sus convecinos. Lo contrario es puro postureo inútil.
CONTEXTO ACTUAL ES UN GRUPO DE OPINIÓN CRÍTICA FORMADO POR
ESPECIALISTAS EN DIVERSAS MATERIAS, PREOCUPADOS POR LA SITUACIÓN ACTUAL.
