La declaración consensuada consta de once puntos en los que estos países resaltan la importancia de la PAC para ofrecer un “suministro seguro” de productos agrarios que responde “a los máximos estándares sanitarios y medioambientales”.

Entre otros aspectos, afirman en el texto que esta política “constituye la primera red de seguridad” para los agricultores y tiene “un efecto directo” sobre sus ingresos. De igual forma, sobre la mesa estará la propuesta de renacionalización de las ayudas, que no se plantean de forma directa pero sí se deja abierta la puerta a ellas, y que ya han cosechado el rechazo de todo el sector.

España defenderá en este encuentro en Bruselas un incremento del presupuesto asignado a la futura PAC porque “si queremos una agricultura moderna, competitiva y sostenible necesitamos un apoyo suficiente”. Son declaraciones del ministro de Agricultura, Luis Planas, que se estrenará como ministro en Bruselas tras sustituir a García Tejerina, durante su intervención en el programa de Agropopular.

Planas precisó que la partida asignada a esta política en el marco presupuestario 2021-27 es de 43.800 millones de euros, un montante importante pero insuficiente y, al igual que la ministra anterior (a la que ha señalado que apoya en este punto) y otros 14 Estados miembros de la UE, trabajará para conseguir un aumento.

De cara a las negociaciones, subrayó que su intención es llevar a Bruselas una posición consensuada con las Comunidades Autónomas, porque es la forma de tener peso en las discusiones. “Si uno se presenta dividido -dijo- le escuchan, toman nota pero pasan al siguiente”, que insistie en una defensa de que no haya recortes en los pagos directos.