Han sido muy peculiares las elecciones de este pasado 10N. Pasarán a la historia porque se afianza la idea de que España queda ya lejos de ser un país bipartidista total, aunque las fuerzas hegemónicas sigan siendo, sobre todo PSOE y el Partido Popular.
El resultado habido, gracias a los votos de los españoles, dice muy mucho de como somos. De como reaccionamos. De como decidimos. De como votamos. ¿ Y como votamos?. pues según de la comunidad en la que vivamos, a la vista de los resultados. Veamos.
El PSOE ha sumado 120 escaños gracias al aporte indispensable y continuo de los votos andaluces, sobre todo, en esta ocasión 25 diputados. El Partido Popular, ha conseguido 88 escaños, una considerable subida pero no la que desde la cocina de los populares se esperaba, ya que se confiaba en más de 100. Y Unidas Podemos, ha bajado en 7 puestos parlamentarios, con lo que se ha quedado en 35.
El caso de VOX es muy significativo pues ha pasado de tener 24 a ocupar una buena parte del hemiciclo con 52 diputados. Todas las encuestas le daban un buen alza pero lo conseguido ha hecho que Abascal y los suyos sonrían desde la atalaya verde ante tamaño éxito.
¿ Y Ciudadanos? En esta formación política se ha cebado el electorado de forma inmisericorde, pues el desastre ha sido total. Se ha quedado en 10 escaños, habiendo perdido la friolera de 47. Se vaticinaba debacle pero no la ruina. ¿Consecuencia?, que su carismático líder, hasta el día de ayer, el abogado Albert Rivera se ha ido para su casa y ha dejado el acta de diputado electo, la presidencia y la militancia de la formación naranja. Y seguramente no quede ahí el asunto. Porque a río revuelto….habrá deserciones y los que quedan querrán seguir en » la pomada». Habrá un congreso extraordinario y de él tendrá que surgir el nuevo capitán que seguramente sea capitana – suena con fuerza Arrimadas – que recomponga el desaguisado, si es que el partido no se va a la garete, algo que los demócratas nunca deseamos por el bien de la política.
EL CASO DE EXTREMADURA
En la región extremeña ha habido cambios significativos como todo el mundo sabrá, ya que debido a la velocidad informativa, desde anoche ya se sabe. pero está bien que signifiquemos la subida de VOX, con un diputado por provincia, la » desaparición parlamentaria» de Ciudadanos, que pierde sus dos representantes, la subida del Partido Popular, que suma uno más, en esta caso una, Teresa Angulo en Badajoz, y la repetición de escaños por parte del PSOE, cinco diputados y diputadas. Unidas Podemos confiaba en la pacense Amparo Botejara pero se quedó en el intento.
Llama la atención que Ciudadanos, al igual que le ha pasado en la mayoría de las provincias, se haya hundido. Además de no conseguir diputados, en las cocinas internas de la formación naranja no todo es diáfano. En Badajoz ha dimitido el concejal zafrense y número uno de los Jóvenes Ciudadanos extremeños Julio Alberto Mendoza, que lo ha hecho público en su muro de Facebook hoy mismo , y la queja del edil y portavoz naranja Francisco Alcántara ante la debacle de su partido, la falta de apoyo de la que ha sido candidata al Congreso Mª Victoria Domínguez y la contestación que algunas sensibilidades tanto en Badajoz como en Cáceres está latente, cuestionando el liderazgo del actual portavoz Cayetano Polo por su forma de proceder en algunas decisiones, según hemos podido saber de fuentes fidedignas.
En cuanto a VOX, la » sorpresa» ha sido que la candidata cacereña Magdalena Nevado haya conseguido ir al Congreso con más de 35.000 votos, un » subidón» que ni los más optimistas auguraban pero una campaña impecable e intensa, con el apoyo de Abascal, Ortega Smith e Iván Espinosa, la han llevado en volandas a la Carrera de San Jerónimo, a pesar de querer desprestigiarla con un vídeo-montaje burdo y soez con denuncias incluidas.
Como habrán observado, poco se ha hablado en la breve e intensa campaña de programa, programa, programa. La política conlleva tales incongruencias y veleidades. Lo cierto es que a fe de equivocarnos, ojalá que sea así, el resultado de las elecciones, tal y como pinta el panorama, es más de los mismo, es decir, el PSOE gana pero no gobierna, los contactos y posibles pactos se sucederán y deseamos fervientemente que no tengamos que visitar los colegios y depositar un nuevo voto en el próximo abril del 2020.
