Extremadura – La consejera de Salud y Servicios Sociales de Extremadura, Sara García Espada, ha confirmado que los médicos residentes que estén en su último año de formación y que pasen consulta este verano lo harán siempre bajo la supervisión de un tutor. Esta medida viene a reforzar la seguridad y calidad en la atención sanitaria, en un año en el que, de manera excepcional, los MIR finalizarán su formación en septiembre en lugar de mayo.
La consejera ha enfatizado que, a pesar de las declaraciones del Ministerio de Sanidad que sugerían la posibilidad de que los residentes trabajaran solos, en Extremadura se seguirá una política de supervisión constante. García Espada ha recordado que, aunque el nivel de competencia de los residentes aumenta con los años, la supervisión nunca debe disminuir, y menos en los momentos finales de la formación.
Además, ha señalado que Extremadura se enfrenta al desafío de tener el mayor número de plazas vacantes en la formación sanitaria especializada de su historia, una situación que requiere atención y mejora. En respuesta, se ha propuesto la elección presencial en tiempo real de plazas y la reducción de la nota de corte para llenar estas vacantes.
En cuanto a la preocupación expresada por el sindicato médico Satse sobre el posible cierre de 617 camas hospitalarias durante el verano, la consejera ha asegurado que los datos no coinciden con los de la consejería. Ha reafirmado el compromiso de la consejería de invertir 13 millones de euros para realizar 7.000 contrataciones en el Servicio Extremeño de Salud, garantizando así la continuidad de una asistencia sanitaria de calidad durante los meses estivales.
Con estas medidas, Extremadura se compromete a mantener la excelencia en la formación de sus futuros médicos y a asegurar la prestación de servicios de salud a todos sus ciudadanos, sin importar la temporada del año.