Extremadura Depor 12

Extremadura, la esperanza del fútbol

DEPORTESECONOMÍA
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El fútbol extremeño vivió su época dorada en los años noventa. Treinta y cuatro años después de bajar a Segunda División, el Club de Fútbol Extremadura consiguió volver a esta categoría del fútbol español. La temporada 1995/1996 es una de las más recordadas de su historia después de conseguir el ascenso a Primera. La gloria duró poco y en 1997 volvían a estar en Segunda, aunque sus esfuerzos volvieron a dar frutos y pasaron de nuevo a la categoría reina en 1999.

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Im: Liga 123

De nuevo, el éxito se terminó demasiado pronto y a partir de entonces todo fue cuesta abajo. La debacle ya empezó a olerse a principios de milenio con el pésimo papel que hizo el equipo primero en Segunda, luego en Segunda B, luego en Tercera y finalmente en la Primera División Extremeña. A todo ello se le suma la deuda millonaria del club y el impago de sueldos. Finalmente, el histórico del fútbol extremeño desapareció en 2010.

No ayudó que España se viera envuelta en una de sus peores crisis financieras de su historia reciente. Los efectos del colapso de la burbuja inmobiliaria de 2006 se contagiaron más allá de la frontera estadounidense y España no pudo escaparse. Extremadura fue una de las regiones más afectadas, llegando al 25 % de desempleo. El fútbol también sufrió las consecuencias, sobre todo por el estrecho vínculo entre este deporte y el sector de la construcción.

Poco a poco, la situación va enderezándose y el futuro parece ahora más esperanzador. Podría tener mucho que decir la industria del entretenimiento online, especialmente las apuestas en partidos de fútbol.

La temporada 2019/2020, una nueva oportunidad para el Extremadura

Tras la disolución del Club de Fútbol Extremadura en 2010, recogió su testigo el Extremadura Unión Deportiva, fundado tres años antes. Actualmente compite en Segunda División, categoría en la que juega desde el año 2018. Liderados por el entrenador Manuel Mosquera, esta temporada el equipo deberá enfrentarse a otros conjuntos que pelearán hasta el final para no caer en las posiciones de descenso, como por ejemplo el Girona, el Rayo Vallecano o el Racing de Santander.

El Extremadura U.D. es el único representante de la comunidad autónoma en Segunda, pero tiene que mejorar su juego si no quiere que la temporada siguiente esta categoría se quede sin equipo extremeño. Por ahora, el Almería, el Cádiz y el Zaragoza son los que más lo tienen a favor para subir a Primera el año que viene, por lo que los de Mosquera pueden sufrir cuando se enfrenten contra estos clubes.

Cómo volver a la época dorada

A estas alturas, no descubrimos nada si decimos que lo más importante para ganar un partido es ser mejor que el rival. Esto puede dejarse al azar, aunque se trata de técnica extremadamente arriesgada. Si se quiere ir sobre seguro, hay que empezar por invertir en buenos jugadores. Todas las esperanzas estaban puestas en el fichaje de José Antonio Reyes, pero tristemente el futbolista sevillano falleció este verano en un accidente de coche.

Para repetir la época gloriosa de su predecesor, el Extremadura U.D. deberá repetir goles decisivos como el de José Tirado en el descuento del partido que les llevó a Primera en 1996. O deberá contar con fichajes revulsivos como los de José Basualdo, Navarro Montoya o Walter Silvani en la segunda vuelta de la temporada 1996/1997. O contar en su plantilla con un goleador como Igor Gluscevic, pichichi de Segunda en 1998 con un total de 24 goles.

El papel del fútbol en la salida de España de la crisis

Los que más se beneficiarán de los éxitos del Extremadura no serán los futbolistas, los directivos del club o los aficionados. No: quienes podrían gozar en mayor medida de su triunfo son todos los ciudadanos de la comunidad autónoma. Todas las esperanzas están puestas en el club presidido por Manuel Franganillo. Por segundo año consecutivo, juegan en Segunda y esto parece predecir un futuro esperanzador.

El fútbol es muy importante por la economía española, y como consecuencia también la de Extremadura. En la temporada 2016/2017, por ejemplo, la industria futbolística generó 15.688 millones de euros, lo que equivale al 1,37 % del PIB. Son muchos los expertos que aseguran que este deporte y todo lo que lo rodea ayudó a España a salir de la crisis gracias a los ingresos en patrocinios, ventas de merchandising, entradas, etcétera.

La importancia de las apuestas deportivas

Otra forma en la que la economía española se beneficia de los ingresos generados por el fútbol es mediante las apuestas deportivas. En este caso no son los clubes los que promueven estas transacciones y no se benefician directamente del dinero generado. Empresas externas dedicadas a las apuestas aprovechan la pasión que mueven deportes como el fútbol y lo convierten en un negocio que el segundo trimestre de 2019 generó 86,45 millones de euros en margen neto de juego.

Las apuestas online, uno de los segmentos que goza de más popularidad en el sector del juego en España, tienen un papel muy importante. Se cree que esta relevancia tendrá todavía más peso a lo largo de los próximos años. Tanto es así que algunos expertos se atreven a predecir que estos operadores de apuestas en línea generarán 1.800 millones de euros en total en 2024. De cumplirse, los ingresos habrán crecido un 166 % respecto al 2017, año en el que se movieron 678 millones de euros.

El Extremadura tiene muchas cosas a favor para poder dejar de una vez por todas la mala racha de las últimas décadas. La temporada 2019/2020 no ha empezado del todo bien, pero la historia del club y de su predecesor ha demostrado que todo es posible y que un gol en el último minuto puede convertir una mala temporada en una excelente.


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