La Comisión Europea ha expresado sus dudas sobre la viabilidad del proyecto de regadío de Tierra de Barros, citando la falta de agua suficiente y la posibilidad de que las infraestructuras creadas resulten inútiles. En un informe escrito a la Junta de Extremadura, la Comisión también cuestionó la declaración de impacto ambiental realizada por el gobierno anterior.
El proyecto, que se encuentra actualmente en el aire, ha sido objeto de críticas debido a la insuficiencia de agua para su desarrollo. Según Ignacio Higuero, Consejero de Gestión Forestal y Mundo Rural de la Junta de Extremadura, Bruselas no ha dado su aprobación debido a las predicciones de que el caudal de agua de la cuenca del Guadiana disminuirá para 2039 como resultado del cambio climático.
A pesar de las preocupaciones de la Comisión Europea, el PSOE insiste en la viabilidad del proyecto y pide al gobierno de PP y VOX que comiencen las licitaciones. El consejero de VOX se ha comprometido a seguir defendiendo el proyecto en Bruselas, donde mantendrá una reunión con el Comisario Europeo de Agricultura el próximo 14 de febrero.