La borrasca ‘Nelson’ ha llegado a España, trayendo consigo una semana de tiempo inestable que afectará a la mayoría de la Península desde este miércoles hasta el Lunes de Pascua. Según Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), esta decimocuarta borrasca de gran impacto de la temporada no solo traerá lluvias generalizadas, sino también fuertes rachas de viento y nevadas en las montañas.
Las lluvias serán menos intensas en el área mediterránea y en Baleares, pero más abundantes en el oeste y la franja central peninsular. El norte de Canarias también experimentará precipitaciones. Las temperaturas mostrarán una tendencia fría en el oeste peninsular y más templadas en el Mediterráneo, aunque se espera una bajada durante el fin de semana.
Este miércoles, los cielos estarán muy nubosos con lluvias casi generalizadas, especialmente en el tercio oeste, donde podrían ser fuertes y persistentes. La cota de nieve variará entre 800 y 1.200 metros en el oeste, y subirá a 1.800 metros en el este. Se prevén rachas de viento que podrían superar los 90 km/h en el sureste.
Para el Jueves Santo, la borrasca ‘Nelson’ barrerá España con precipitaciones generalizadas y abundantes en la mitad oeste, la franja central y el Pirineo Aragonés. En el sur de Galicia, oeste y sur de Castilla y León, Extremadura y oeste de Andalucía, las lluvias serán persistentes y podrían incluir tormentas. No se esperan lluvias en las regiones mediterráneas del Levante y en Baleares.
El Viernes Santo continuará la inestabilidad, con lluvias en casi toda la Península, siendo más abundantes en el oeste y centro. Aunque con baja probabilidad, el área mediterránea podría registrar algunas lluvias débiles y dispersas. La cota de nieve se mantendrá entre 800 y 1.000 metros en la mitad norte y 1.400 metros en el sur. Los vientos amainarán en amplias zonas, pero el temporal marítimo seguirá siendo importante en el norte de Galicia y el Cantábrico.
Se espera un “importante contraste térmico” para el Viernes Santo, con temperaturas máximas por debajo de los 10ºC en muchas capitales de Castilla y León, mientras que el área mediterránea podría superar los 20ºC. Este evento meteorológico destaca por su capacidad para afectar a una amplia gama de regiones con diferentes impactos, desde lluvias y tormentas hasta nevadas y fuertes vientos, marcando un periodo significativo de tiempo adverso en España.
