Este aumento retributivo es la primera consecuencia de la aprobación de los presupuestos generales de la Comunidad Autónoma, según ha explicado Gil Rosiña. El acuerdo contempla una subida salarial del 2,25 por ciento que comenzará a abonarse en la nómina de enero.
El número de funcionarios y empleados públicos que recibirán este nuevo salario “puede parecer más o menos elevado”, ha dicho la portavoz, pero son “los necesarios y los esenciales” para cumplir con el modelo de prestación de servicios públicos fundamentales (enseñanza, educación…) por el que apuesta el Gobierno extremeño.
A lo largo de la legislatura, desde 2016, la Junta ha aplicado la subida salarial máxima permitida por el Gobierno central para los empleados públicos lo que ha supuesto un aumento total en las retribuciones de un 6 por ciento.