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Cartas acehucheñas

93 – MÁS HISTORIA LOCAL

Estimados compatriotas: Seguimos leyendo los apuntes de la Wikipedia, es decir, de alguien que los puso en internet, y luego nos permitiremos el lujo de opinar sobre esto o lo otro. Pero como interesa a alguien,  vamos a ello. Dice así: SIGLO XIV, creación de la “La Encomienda” perteneciente a la Orden Militar de Alcántara. Se estableció un Concejo pues se habían superado los 50 vecinos con la incorporación de algunos habitantes de “Los Lucillos” y otros pueblos desaparecidos (Almofeda, Casal de Martín Yáñez y Godos). El pueblo era, en realidad, un arrabal de la villa de Alcántara (…..)El Concejo era el dueño de las tierras que no pertenecían directamente a la Orden, que eran: las cuatro Jaras, El Corianu, El Valsanu, el Hortigón y la Hesa. Se labraba La Jara, por cuartos anuales. La tierra se dividía en senaras (palabra leonesa que significaba siembra) que se sorteaban entre los vecinos según la necesidad de cada cual. Las otras tierras eran baldías: las bellotas se arrendaban, la leña se repartía y los pastos de La Hesa eran para los animales de labor.

El Comendador de la Orden era el duelo de La Encomienda, formada por: Los Noquis, La Torrecilla, El Sesmu, La Espigaera y San Cristóbal. Además del Valle de la Huerta (Hoy Pozu Valli) y del monopolio de los molinos y aceñas en el río Tajo. (…..) Al final de la Reconquista los comendadores dejaron de vivir en el lugar y la Encomienda fue administrada por terceras personas (…..) La única propiedad intrusa era la del Concejo de la Mesta que por 1270 tenía el privilegio de abrir una cañada a través de las tierras acehucheñas.

Comentario: En realidad poco que objetar. Que llegara algún moro de Los Lucillos, posible pero poco probable. Las relaciones con aquellos no habían sido buenas ni con acehucheños ni con ceclavineros. De los otros pueblos desaparecidos, vaya usted a saber. Arrabal o pedanía de Alcántara pues sí, ciertamente, hasta el Privilegio de Exención de la Villa que consiguieron Juan de Morales y otros vecinos ante Felipe II. Qué manía con las grafías carcamales que puede que oigamos aún, pero desde luego ya no escribimos. Coriano, Valsano, Ortigón, Dehesa Boyal, Noques, Sesmo, Espigadera y el Pozo Valle. ¿Desde dónde venía la cañada que pasaba por aquí? Nos queda la calle Maestro Alejandro que siempre hemos conocido como La Cañada, que entraba por El Cristo del Humilladero, pasaba por la Plaza y continuaba con la misma anchura por la calleja de Jacinto y salía paralela a la hoy calle Pizarro. Queda del Cristo a la Plaza, y gracias.  ¿Qué tal las perdices? Yo, una, pero no ahí. Ya nos veremos en las batidas. Saludos cordiales.


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