El PP ha registrado esta petición ante su «preocupación» por que «no ha habido ningún avance significativo hasta la fecha» cuando ya ha pasado más de la mitad de la legislatura, según ha dicho en rueda de prensa su portavoz de Desarrollo Rural, José Antonio Echávarri.
En su opinión, «no se ha hecho nada o muy poco» en relación a estos tres regadíos privados, cuyos proyectos iniciales «dejó» preparados el anterior Gobierno regional de José Antonio Monago.
En el caso de Tierra de Barros, ha asegurado que el Ejecutivo del PP estableció los recursos hídricos suficientes, la declaración de interés general, el 98 % de las voluntades de los regantes y dejó hecho el anteproyecto que luego el Gobierno socialista «echó para atrás» al considerar que «no era viable» y encargó otro proyecto.
Además, ha criticado, dio «un giro total» a la financiación al pasar de una inversión a partes iguales entre la Junta y la comunidad de regantes (50 % en cada caso), a una cofinanciación entre el Ejecutivo extremeño, el Ministerio y los regantes (33 %) hasta duplicar el presupuesto, que es de 200 millones de euros.
En este sentido, el diputado popular ha preguntado a la consejera si se conoce la respuesta del Ministerio a la carta que ésta dijo le iba a remitir pidiéndole que se implicara en la financiación del proyecto de regadío pues «ya han pasado tres meses».
Echávarri ha recordado que García Bernal manifestó que «se haría sí o sí», por lo que entiende que será una realidad «con la participación o no» del Mapama.
En cuanto al regadío de Monterrubio de la Serena, fue declarado de interés general en 2002 y después se firmó un convenio con el Ministerio para que entrara en la financiación, el cual fue anulado más tarde por el Gobierno central ya que «los regantes no podían avalar» el proyecto.
Ante esta contrariedad, el Ejecutivo de Monago «lo convirtió en un proyecto de la Junta» con una reducción de las hectáreas para garantizar su viabilidad, de las 6.000 iniciales a 3.500.
Pero, ha dicho, según lo aprobado recientemente en Consejo de Gobierno, la superficie regable queda reducida ahora a 1.200 hectáreas, para ironizar después que «como sigan rebajando va a quedar en un huerto».
El parlamentario ha cuestionado por qué siendo el de Monterrubio un regadío privado lo cofinancia en un 75 % la Junta y en un 25 % los regantes, mientras que en otros casos es del 50 %.
A este respecto, se ha preguntado «si es porque hay alcaldes socialistas», lo que supone «un perjuicio comparativo», o en el caso de Arroyo del Campo, «si tiene intereses en la zona algún alto cargo».
Sobre este último, que niega sea un proyecto del actual Gobierno socialista, «no han hecho absolutamente nada en la práctica», salvo constituir una mesa que «no ha avanzado nada» y realizar declaraciones en contra del anterior Ejecutivo.
Echávarri ha preguntado a García Bernal por el resultado de la recogida de voluntades de los regantes, toda vez que el plazo finalizó el 31 de mayo pues, según le consta al PP, el proyecto por ser «inviable y caro, no se podrá hacer», por lo que ha instado a la Junta a modificarlo para que pueda llevarse a cabo.
