Existen distintas formas de trabajar en España, bien sea en relación de dependencia con una empresa o de manera independiente (como autónomo). Ser trabajador independiente en España es algo que ha dado mucho de qué hablar, por lo complicado que puede llegar a ser, dado la cantidad de impuestos que se deben pagar. Por ello, se debe tener una gestión financiera correcta, tanto para pagar los impuestos a tiempo, como para poder tener dinero suficiente. Veamos a continuación en qué consiste ser autónomo y algunos consejos para una gestión financiera eficiente.
¿Qué es ser autónomo?
Ser autónomo o trabajador independiente en España consiste en trabajar de manera independiente, es decir, no existe una relación de dependencia con alguna empresa y las actividades económicas se realizan a nombre de la persona. En estas actividades, el trabajador independiente debe emitir facturas y se encarga de su cotización en la Seguridad Social, lo que supone hacer los pagos mensuales.
Existen distintos tipos de autónomos en España, según el tipo de actividad que lleve a cabo y la manera en que lo haga. De esta forma encontramos trabajadores autónomos, freelancers, autónomos societarios, trabajadores autónomos económicamente dependientes (TRADE) y autónomos agrarios.
¿Por qué es importante la gestión financiera?
Las finanzas son de gran importancia en los negocios y los autónomos no se escapan de esa situación, ya que deben ser rentables en el tiempo para poder cubrir sus gastos. Por tanto, cuidar la gestión financiera es clave para un autónomo, haciendo el pago de sus impuestos, cumpliendo la documentación necesaria y haciendo un uso eficiente de los recursos.
La idea de una buena gestión financiera de un autónomo es poder cubrir los gastos que requiere su funcionamiento en el trabajo y que tenga suficiente dinero para sus gastos personales y ahorrar. Además, contar con suficiente dinero ayudará a planificar a largo plazo y poder crecer como un trabajador independiente en el largo plazo.
¿Cómo gestionar tus finanzas como autónomo?
Ahora que sabemos la importancia que tienen las finanzas para un autónomo, veamos algunos puntos que pueden ayudar en la gestión de las finanzas como un trabajador independiente.
1. Crea un presupuesto y planifica
La planificación es clave para un manejo eficiente de las finanzas. Así como las empresas hacen planes de negocio y se plantean objetivos a corto, mediano y largo plazo, los autónomos deben estar en capacidad de planificar. Para ello es recomendable que hagan un presupuesto considerando sus ingresos y egresos, teniendo en cuenta separar las finanzas personales de las profesionales para hacer una correcta planificación. Lo ideal es que las finanzas personales se planifiquen por separado con el presupuesto que asigne el autónomo para sus gastos.
Además de estructurar los ingresos y gastos que debe hacer un autónomo, es importante que planifique los objetivos que desea alcanzar para poder dirigir sus decisiones en pro de estos. El trabajador independiente debe ser muy cuidadoso en su planificación, dado que depende de sí mismo para conseguirlos y debe hacer frente a gastos fuertes como los impuestos.
2. Usa herramientas para facilitar la gestión
La gestión financiera puede ser compleja por la cantidad de aspectos a cuidar y el hecho de llevar un registro de ingresos y gastos como si fuera una contabilidad. Lo más recomendable para facilitar el proceso es usar herramientas tecnológicas que ayuden a agilizar el proceso.
Por ejemplo, se puede optar por algo muy básico como un registro en un archivo excel para llevar un control de ingresos y gastos, contrastando contra los objetivos que se tienen planteados. Pero también se puede hacer uso de aplicaciones móviles para llevar un control más detallado y seguido de las finanzas.
3. Paga los impuestos a tiempo
Uno de los puntos más importantes para los autónomos en España es el pago de los impuestos, tanto por ser un requisito para operar de manera legal, como por lo cuantiosos que pueden llegar a ser. Para poder hacerlo es importante la planificación financiera, ya que se necesita de liquidez para hacer el pago de los mismos.
Los autónomos deben pagar impuestos por la actividad económica (impuesto sobre la renta) y el impuesto al valor añadido, además deben hacer el abono a la seguridad social, ya que estos se encargan de su cotización, al no tener a una empresa que haga el proceso. Esto hace que sean varios los pagos a realizar y pueden llegar a representar un % importante de los ingresos, por ello es vital que se considere dentro de la planificación financiera.
Por otro lado, para asegurarse de hacer los pagos por el monto correcto, es ideal buscar asesoría de un abogado o un contador quien pueda brindar orientación sobre la declaración trimestral de autónomos y otros procedimientos que deba realizar.
4. Ahorra dinero
El ahorro es parte fundamental del crecimiento de un profesional, al permitir acumular riqueza que pueda ser utilizada para seguir expandiendo su desarrollo y planificar su vejez. Para poder ahorrar, la planificación financiera es clave, debiendo plantear objetivos para ahorrar, por ejemplo, un % del ingreso o un monto fijo que se deba ahorrar mensualmente. Esta es una de las mejores formas de conseguir ahorrar de manera consistente todos los meses.
Lo ideal para ello es tener una estimación del ingreso mensual y fijar el monto o % que se ahorrará. Una vez se reciba el dinero, guardar lo planificado y usar la diferencia para cubrir los gastos necesarios.
Además, el dinero ahorrado puede usarse para invertir en activos que generen ingresos, tales como acciones, bonos, propiedades y demás. La idea es que estos puedan generar ingresos pasivos que se puedan seguir reinvirtiendo.
5. Separa las finanzas personales de las profesionales
Así como un emprendedor debe separar las finanzas personales de las finanzas de su empresa, un autónomo debe hacer lo mismo. Una manera de hacer esto es tomar el total de ingresos, calcular lo que se debe pagar en impuestos y otros gastos y la diferencia verla como un sueldo para la persona.
Con ese sueldo es que la persona debe planificar sus finanzas personales, tomando una porción para cubrir gastos mensuales y tomando una fracción para ahorrar, tal como explicamos anteriormente. Esto permitirá poder cumplir siempre con el pago de las obligaciones (impuestos y aportes a la seguridad social).
6. Ten un fondo de emergencia
A un autónomo, tal como a cualquier persona, se le pueden presentar gastos inesperados. Por ello, es de gran importancia tener un fondo de emergencia para cubrir cualquier gasto imprevisto. Para conseguir construir este fondo, es clave el ahorro, ya que debemos destinar una fracción de dinero que deberá ser ahorrada hasta conseguir un monto determinado.
Una de las reglas que suele mencionarse en la planificación financiera es que lo ideal es un fondo de emergencia que permita cubrir los gastos de 3 meses (incluyendo solo los gastos más básicos). Por lo tanto, si necesitas 700 euros para cubrir tus gastos mensuales, el fondo de emergencia debería ser de unos 2100 euros. De esta forma, si no puedes trabajar por un tiempo o si debes hacer frente a un gasto no previsto, tendrás la liquidez necesaria para cubrirlo.
7. Contrata un seguro
Los seguros son una gran herramienta para cubrirse de riesgos. Si trabajas como autónomo que contrata a otras personas, puede ser de gran utilidad tener un seguro para los trabajadores, cubriéndose en caso de accidentes, incapacidad y demás. Si como trabajador independiente tienes un vehículo y es una herramienta de trabajo, es ideal tener un seguro para el mismo, de modo que en caso de algún accidente, el seguro pueda responder.
El tipo de seguro que convenga dependerá de las actividades que realice cada autónomo, por ello lo mejor es analizar la situación de cada persona para poder tomar la mejor decisión.
8. Evita endeudarte en exceso
Si bien el endeudamiento puede ser una herramienta de gran utilidad, apalancarse en exceso puede ser peligroso, porque se puede comprometer en exceso el ingreso mensual. Por tanto, un autónomo debe evaluar sus finanzas antes de decidir endeudarse, de manera que no deba destinar una gran porción de sus ingresos para el pago de la deuda.
Lo más importante es que el nivel de endeudamiento no comprometa los gastos mensuales básicos que debemos cubrir, tal como el alquiler, servicios, mercado, impuestos y demás. Por tanto, esto debe ser considerado dentro de la planificación financiera de un autónomo.
Gestión financiera para autónomos: la clave para la estabilidad
La gestión financiera es de vital importancia para los autónomos, tal como ocurre con los trabajadores y las empresas. La clave es tener los objetivos claros y hacer un uso eficiente de los recursos. Recuerda que como trabajador independiente debes hacer pago de impuestos y encargarte de tu cotización en la seguridad social, por tanto es importante que tengan en cuenta todos estos gastos y que hagas las declaraciones a tiempo. Anímate a planificar tus finanzas y verás los cambios muy pronto.
