Un grupo de viajeros llevan más de 24 horas atrapados en un autobús que cubría el trayecto Granada-Madrid. El vehículo ha quedado atrapado por la nieve en la autovía A-4 a su paso por Aranjuez. Los pasajeros denuncian que nadie les ha llevado comida ni bebida en todo el trayecto, y que no saben cuándo podrán volver.
Más de 60 personas permanecen atrapadas, desde hace más de 24 horas, en el interior de un autobús de pasajeros que cubría el trayecto Granada-Madrid y que ha quedado atrapado por la nieve en plena autovía A-4 a su paso por la localidad de Aranjuez. Cansados y desesperados, parte del pasaje ha decidido denunciar la situación de “abandono” que creen que sufren. Sin comida, sin bebida ni ropa seca, estos viajeros se han visto obligados incluso a pasar una noche en el interior del autobús.
Francisco Salas es un joven granadino de 24 años que ha narrado a NIUS esta odisea desde el interior del vehículo. Emprendieron el viaje desde Granada el viernes, a las cuatro de la tarde. Fran viajaba junto a unas amigas a la capital de España para presentarse al casting de un concurso de televisión. Pero al llegar al norte de la provincia de Toledo, comenzaron a sufrir los estragos de ‘Filomena’: “Nos tuvimos que parar en La Guardia, en Toledo, a pasar la noche, porque era imposible continuar por la nieve. Tuvo que venir la Guardia Civil a sacarnos, marcha atrás, de la autovía”.
“La noche en el autobús ha sido muy incómoda, hace mucho frío y muchos pasajeros estábamos empapados”, cuenta Francisco. A las nueve de la mañana de este sábado, reemprendían la marcha, pero en torno a cuarenta minutos después, el autobús volvía a quedarse atrapado, esta vez atascado en la nieve en plena autovía A-4 a la altura de Aranjuez, ya en Madrid. Desde las diez de la mañana llevan estas 60 personas atrapadas en el interior del vehículo, con cada vez menos comida y bebida: “Estamos ya sin comida, ni agua, y te puedes imaginar el baño del bus como está. No es higiénico ni salubre que 60 personas estemos hacinadas en un bus en plena pandemia”. Así lo denuncia Fran, quien además asegura que, más de 24 horas después de emprender el viaje, “nadie nos ha traído comida, agua o ropa seca”.
Otra de las protestas de los pasajeros es la falta de alternativas ofrecida por la empresa que gestiona los transportes. “Pedimos que, si es imposible llegar a Madrid, al menos nos fleten otro vehículo para poder regresar a Granada”, reclaman los viajeros, quienes aseguran que dentro el bus ya se viven momentos de cansancio y desesperación. “Hay gente que tiene que tomarse medicación y no tenemos ni agua, están derritiendo nieve para poder beber”, asegura Fran, pasajero afectado, a NIUS.
