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15 espectáculos conforman el XXVII Festival de Teatro Clásico de Cáceres

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La secretaria general de Cultura, Miriam García Cabezas ha destacado la consolidación de la plaza de San Jorge como escenario del Festival, junto con la plaza de las Veletas como los dos espacios emblemáticos, a los que se unen otros complementarios que también serán sede de diferentes actividades, como la Concatedral de Santa María, el Museo de Cáceres y la Filmoteca de Extremadura, entre otros.

El festival, que organiza el Consorcio del Gran Teatro de Cáceres, contará con actores relevantes como Arturo Querejeta, Jacobo Dicenta, Guillermo Serrano (que actúa por partida doble, protagonizando Don Juan Tenorio, y como secundario en Ricardo III), Eva Marciel, José Antonio Sayagués, Ingrid García Jonsson, Fernando Ramos, entre otros, y directores como Eduardo Vasco o Laila Ripoll.

La sección principal de este encuentro teatral, Escena Clásica, ha programado en tres espacios escénicos quince espectáculos, tres más que el año pasado. Abrirá el 15 de junio en el escenario de la plaza de las Veletas con La novia de Don Quijote, un montaje en torno al personaje de Dulcinea /Aldonza Lorenzo, la amada ideal del protagonista de la novela de Cervantes.

Este es uno de los cinco montajes que tienen como centro la figura y la obra del escritor manchego, bien mediante variaciones en torno a sus personajes, como La novia de Don Quijote, Don Quijote en la Patera (el 25 de junio, Gran Teatro), uno de los espectáculos concebidos para el público infantil, o Soñando a Cervantes (el 30 de junio, plaza de San Jorge), un recorrido por el autor y sus personajes, bien a partir de obras teatrales de Cervantes como la comedia El rufián dichoso (el 24 de junio, plaza de las Veletas) o la histórica El cerco de Numancia (el 29 de junio, plaza de San Jorge).

El otro foco de atracción del festival es la Compañía Nacional de Teatro Clásico (CNTC), que vuelve a Cáceres por segundo año consecutivo y lo hace en coproducción con el grupo Micomicón. Ambos han montado La judía de Toledo, una pieza poco conocida de Lope de Vega, que podrá verse el 1 de julio en la plaza de San Jorge dirigida por Laila Ripoll. La hermana menor de la CNTC, la Joven Compañía Nacional de Teatro Clásico acude también de nuevo al festival cacereño. Presentará otra obra de Lope de Vega, pero en este caso posiblemente la más conocida de las que escribió, Fuenteovejuna (el 16 de junio, Gran Teatro), un drama en torno a la resistencia de un pueblo frente al poder, al frente de cuyo reparto se encuentra Jacobo Dicenta.

Si Fuenteovejuna es una de las cumbres del teatro español, La vida es sueño, de Calderón de la Barca, es otra de las indiscutibles aportaciones dramáticas de la historia teatral hispana. Los espectadores del festival podrán ver el 18 de junio, en la plaza de las Veletas, la versión que ha concebido la compañía zaragozana Teatro del Temple en torno a una obra que reflexiona sobre la libertad humana.

El tercer puntal de grandes clásicos españoles es posiblemente La Celestina. Uno de los beneficios de un festival de teatro como el de Cáceres es que permite al espectador confrontar diferentes versiones de una misma obra, como ocurre con La Celestina, que el año pasado presentó Teatro de la Abadía. Con otra concepción diferente, el grupo andaluz Atalaya se interna este año por los vericuetos del amor y la muerte de la obra de Fernando Rojas, con la que se cierra el festival el 2 de julio en la plaza de San Jorge.

William Shakespeare es uno de los ineludibles del festival cacereño. Dos montajes dan cuenta de ambas visiones contemporáneas del legado shakespeariano: Medida por medida (25 de junio, plaza de las Veletas), en cuyo reparto figura la joven Ingrid García-Jonsson, nominada en el 2015 al Goya a la mejor actriz revelación por Hermosa juventud, y Ricardo III (17 de junio, plaza de las Veletas), dirigida por Eduardo Vasco, quien a su vez fue director de la Compañía Nacional de Teatro Clásico entre 2004 y 2011. Una de las peculiaridades de este montaje es su vestuario, que ha sido concebido por el reconocido modisto Lorenzo Caprile.

El talento extremeño mostrará en esta veintiocho edición la atención que en la comunidad autónoma se presta a los clásicos. Amarillo Producciones afronta Don Juan Tenorio, de Zorrilla en el año en que se cumplen doscientos de su muerte. La versión que presenta en Cáceres, los días 21 y 22 de junio en la plaza de las Veletas, la ha escrito el dramaturgo pacense Miguel Murillo. Verbo Producciones se atreve el 29 de junio en la plaza de San Jorge con El cerco de Numancia, de Cervantes, sobre el hecho histórico del asedio que el ejército romano llevó a cabo en torno a la población de Numancia. Teatrapo recurre de nuevo a Murillo para evocar en Soñando a Cervantes al autor del Quijote y a sus personajes (30 de junio, plaza de San Jorge).

El acento cómico de la programación lo pone Morboria que, tras su presencia el pasado año con El burgués gentilhombre, de Moliére, vuelve, el 23 de junio en la plaza de las Veletas, con la popular El lindo don Diego, de Agustín Moreto.

El único espectáculo no teatral de este año es Música en plazas y palacios, un concierto con piezas cantadas de los siglos XV al XVII, que presenta el conjunto Cámara Antigua en la Concatedral de Santa María el viernes 16 de junio en la concatedral de Santa María.

Las actividades paralelas del festival, agrupadas en la sección Piezas clásicas, reúnen a los más jóvenes intérpretes que previsiblemente van a renovar la escena extremeña. Proceden de la escuela Maltravieso Teatro y de la Escuela Superior de Arte Dramático de Extremadura. Los primeros escenificarán, en el apartado Esbozos áureos, algunas de las escenas más significativas del teatro universal (15, 21, 22 y 30 de junio) y los segundos ofrecerán (23 y 24 de junio) su montaje de fin de curso, la mágica obra de Shakespeare Sueño de una noche de verano. La tercera actividad de esta sección es Leyendas del caballero, un recorrido abierto al público por diversos rincones del casco monumental de la mano de un personaje que desvelará el 17 de junio leyendas y mitos de la ciudad y la provincia de Cáceres que propone Insertus y Cia.

La intención del festival de atraer a los niños al teatro se plasma en la propia sección oficial, con dos montajes: Don Quijote en la patera, de Teatro Clásico de Sevilla, y La compañía del Tenorio, de la extremeña Asunción Mieres, más los talleres Piratas, novicias y don Juanes, que propone Insertus y Cia, donde recibirán nociones sobre maquillaje, vestuario y mobiliario y darán sus primeros pasos en el arte de la interpretación.

La exposición que organiza el festival en esta edición está dedicada al vestuario y reúne en el Museo de Cáceres doces vestidos, seis masculinos y seis femeninos, de los siglos XVI y XVII pertenecientes a la María de Mello Colection.

La parte de reflexión del encuentro teatral la aportan el Gran Teatro y la Escuela Superior de Arte Dramático de Extremadura (ESAD), que han organizado entre el 19 y el 22 de junio el curso El laboratorio del clásico, cuya matrícula es gratuita por orden de inscripción en la ESAD. Intervendrán la dramaturga Ana Zamora, sobre el teatro prebarroco; la actriz y dramaturga Maruchi León, sobre La dama boba; el director y dramaturgo Denis Rafter, sobre Shakespeare, y el profesor de la Uex Miguel Ángel Teijeiro, sobre Torres Naharro.

Por último, la sección Cine entre bambalinas ha programado dos películas en la Filmoteca de Extremadura: la española Las furias, que supone el debut como director de uno de los principales directores teatrales españoles, Miguel del Arco, y Love and friendship, la adaptación del relato corto la novelista británica Jane Austen Lady Susan.

 


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