INTELIGENCIA EMOCIONAL Y EL PODER DE LOS PENSAMIENTOS…

“Sé que en mi interior se encuentra todo el consuelo que necesito”

Anónimo.

Una de las leyes fundamentales de la inteligencia emocional, es la autorregulación de los pensamientos para que las emociones sean más placenteras y positivas. Los pensamientos viven con nosotros constantemente. Tenemos pensamientos positivos y negativos, pero son los negativos los que perturban nuestra mente, esto nos afecta a nuestras emociones  y después lo llevamos a la acción. Si dejamos que los pensamientos negativos nos dominen, podemos obtener  consecuencias nefastas para nuestra salud mental y física. Con lo cual, necesitamos controlar los pensamientos negativos para que no afecten a nuestra vida cotidiana de forma pésima y nos lleven a actuar erróneamente.

Los pensamientos positivos pueden facilitar que consigamos  nuestras metas.

Los pensamientos en general, son un arma de doble filo, con ellos podemos morir de miedo, enfermar de pena, contagiarnos de la tristeza de quienes nos rodean ya que estamos divididos entre las ganas de alimentarnos con pensamientos y emociones positivas y la tentación de caer en los negativos que nos tienden pequeñas trampas para nuestra salud mental y física.

Los pensamientos negativos están entre nosotros. Tenemos muchos miedos como el miedo al abandono, que puede ser debido a una proyección de experiencias pasadas en la relación, o bien por carencias afectivas en la infancia, u otras vivencias. A veces en la relación con los hijos, tenemos un patrón de pensamiento negativo, adelantándonos a lo que pueda sucederles, tendemos a sentir culpa previa a ver los resultados y esto  no ayuda. Lo que realmente ayuda  es la confianza, la comunicación, el afecto, todo ello va relajando muchos miedos.  Si uno enfoca el futuro con miedo,  posiblemente, ese miedo se puede convertir en realidad. El mundo se debe enfocar con ganas y confianza.

Muchas personas tienen miedo al envejecimiento, estos es debido a que las personas tienen menos fantasías de cambio. Pensar así, es darle una interpretación muy limitadora cuando la riqueza máxima es el aquí y el ahora, en el presente. Seria todo mucho más llevadero y más intenso,  si enseñamos y aprendemos a vivir intensamente lo que tenemos en el momento, en el ahora…

La vida es maravillosa y es un proceso de aprendizaje continuo. Hay que plantar cara a los miedos y desenmascararlos.

Los miedos se convierten en fobias cuando los llevamos a los extremos, que nos impiden funcionar normalmente. Si dejamos que las influencias negativas, recuerdos tóxicos, bloqueos psicológicos  no invadan, podemos resentirnos y enfermar de cuerpo y mente.

Podemos afrontar los miedos al ser conscientes de ellos, después adquiriendo un compromiso de cambio con nosotros mismos para modificar los pensamientos negativos por los positivos.

Démonos mensajes positivos e introduzcamos en nosotros un menú de buenas acciones para prevenir las influencias negativas. Aprendamos a hablarnos con un diálogo interno positivo y constructivo para que nuestra autoestima sea más sana y nuestra vida más feliz.

No se trata de ser perfectos, se trata de ser conscientes de todas las zonas del menú de la vida. En la vida, te llegan oportunidades positivas o negativas  y Tú puedes elegir cada día como mejorar cada aspecto ella. Nuestro cuerpo está en constante proceso dinámico no solo con lo alimentamos con lo que comemos si no con los que pensamos, con lo que esperamos, con lo que  escuchamos o con lo que sentimos.

Como dice Elsa Punset: “Elijamos un menú saludable”.

Os deseo una vida feliz y os envío un abrazo intenso.

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