El Juzgado de Primera Instancia Número 2 de Barcelona ha desestimado la demanda contra los cocineros de El Bulli Ferran Adrià y Juli Soler que presentaron los hijos de su exsocio Miquel Horta, quienes reclamaban ser propietarios del 84 % de las acciones del restaurante.
Según han informado fuentes judiciales, la sentencia rechaza anular la compraventa del restaurante El Bulli, efectuada en 2005, como pedían los hijos de Miquel Horta alegando que Adrià y Soler habían engañado a su padre al comprarle su participación en el local a un precio muy inferior al real. Adrià ha dicho sentirse «muy satisfecho» por esta sentencia, que considera que es «un buen punto de partida» para la fundación en la que reconvertirá su famoso restaurante «elBulli» el próximo mes de febrero.